Miguel Ángel Jiménez

Comentario Dominical

Miguel Ángel Jiménez


Dios siempre mira hacia adelante

04/04/2025

Es el domingo quinto de Cuaresma el que vivimos este domingo y que nos ayuda ya a ver en el horizonte el Domingo de Ramos: el pórtico de la Semana Santa.

En este domingo rezamos con el pasaje de la mujer adúltera. Primero, aquellos que están dispuestos a juzgar, a erigirse en dioses de la vida de los demás: «Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio». Y ponen a Jesús en situación difícil: la de condenar para cumplir la Ley, apedrearla, por tanto, o la de dejarla ir a costa de romper con la Ley de Moisés.

A Jesús no le importa nuestro pasado. Tampoco el de la mujer adúltera y, por eso, le dice: «Anda, y en adelante no peques más». La rehabilita, la levanta y la ayuda a seguir caminando. Una mirada de futuro, de esperanza, de curación, de perdón.

En realidad, todo se reduce a la pasión que Dios tiene por el hombre y a cómo nosotros descubrimos todo lo que nos quiere y está dispuesto a dar por nosotros: la vida. Cumplir la Ley, cumplir los mandamientos, ser cristiano hoy no trata de cumplimiento de normas. No. Trata de descubrir un amor desbordante y apasionado, que cura: el que Dios nos tiene. Cuando descubrimos su perdón, que encuentra su raíz en el amor, entonces renacemos, somos hombres y mujeres nuevos.

Una llamada fuerte a la conversión personal. Dejamos de mirar a otros para descubrir nuestras propias miserias. Así permitimos que Dios nos cure, nos levante, camine con nosotros.

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