Hay cosas evidentes en los periódicos que cuando las leemos, tenemos que afirmar sus evidencias con un gesto de humildad que nos congratula su realismo. El pasado domingo leímos algunas con estas características. Una de ellas referida a Felipe VI que aseguraba una encuesta:«Don Felipe es mayoritariamente apreciado y también su hija, la princesa Leonor». Al lado figuraba otra información que con distinto cascabel anunciaba: «Saturados de política» expresaba un texto indicativo: «Es la gasolina de la actualidad, pero limitarse a ella es mediocre», lo que indicaba que parte de ellas, gestadas a través de los numerosos gabinetes de prensa colocados junto a los políticos buena parte de ellos, con extraordinaria profesionalidad y no digamos nada de los que levantan con su sabiduría y eficacia las redacciones de todas las cabeceras de la prensa española, tanto la provincial, regional y nacional. Una vez explicado el porqué de esta presentación, pasamos al argumento de esta página de opinión, aclarando el titular de cabeza. Los periódicos dispusieron así el encuentro, con titulares así : «Un bombardero sobre Cornellá», y extendía lo que percibía lo que iba a ocurrir según sus apreciaciones: «El Madrid visita al Español con el dedo en el gatillo: ha marcado tres o más goles en doce de sus últimos catorce partidos». Vuelve Vinícius. Y desde aquí, lo ocurrido en el encuentro con titulares angustiados a doble página: «Un mal Madrid y un horrible arbitraje», con subtítulos penosos: «Un gol de Romero que había merecido la expulsión por una terrible entrada a Mbappé. El árbitro Muñiz había anulado antes un gol a Vinícius y el equipo espabila al final. Rüdiger se lesionó y era el cuarto partido sin gol». El entrenador del Español, Manolo González, declaró al final del encuentro con interrogación incluida:«¿Roja? Bien arbitrada, es una gran victoria. Estoy muy feliz por la afición que se lo merece todo y muy contento con los jugadores que les hacía falta una alegría de este tipo».
 Por su parte, el míster del Real Madrid, Carlo Ancelotti, mostraba su disgusto tras el fallido encuentro: «Es inexplicable que no sacase roja a Romero. Lo más importante es vigilar y proteger a los jugadores. Ha sido una entrada muy fea con riesgo y afortunadamente no ha pasado nada. Pero había riesgo de lesión, el VARestá para esto». El futbolista que estuvo a punto de provocar una grave lesión a Mbappé se sinceraba consigo mismo: «Sabía que era imposible pararlo en carrera e intenté pararlo como pude. Fue una entrada un poco fea, le pedí perdón. Es algo que no fue a más. Se quedó ahí». El héroe del partido fue el guardameta del Español, Joan García, que se mostraba muy satisfecho de las paradas que realizó. «En estos partidos sabes que vas a tener mucho trabajo y hay que tener un punto de suerte que también hemos tenido. Estaba concentrado en qué me llegaría mucho e intenso trabajo y salió bien». Hay que modificar comportamientos a raíz del pasado encuentro. Uno sobre todos: los primeros minutos son tan importantes como los últimos. Y en esas estamos.