José Rivero

Doble Dirección

José Rivero


Una nueva guerra fría

19/02/2025

Las afirmaciones del vicepresidente de Estados Unidos, J. D. Vance, en la Conferencia de Seguridad celebrada la pasada semana en Múnich, relativas a la organización estratégica de la defensa en Europa, junto a la entrevista telefónica, horas antes de la Conferencia, del presidente Donald Trump con el mandatario ruso Vladímir Putin, relativas al final de la guerra de Ucrania, han dejado entrever el final de una época. 
Abre el final del atlantismo conocido, de la organización militar conocida como OTAN, tras 80 años de recorrido y que han sostenido el largo periodo conocido como Guerra Fría. Periodo de distensión por el miedo y de contención por la disuasión del armamento nuclear. Periodo que transcurre –sin acuerdo explícito de su comienzo formal– entre 1945, acuerdos de Yalta y Potsdam y 1948, con el acuerdo de Bruselas que acabaría dando paso al WUDO, anticipo de la posterior OTAN que se plasmaría ya en 1949 con el acuerdo de Washington. Intensificando los años del bloqueo de Berlín –1948-1949–, la guerra de Corea –1950-1953–, el Pacto de Varsovia de los países satélites de la órbita de la URSS –1955–, y sobre todo, el proceso de construcción del muro de Berlín entre 1958 y 1963, con el episodio extremo de 1961. Visualización de los dos bloques que plasmaría la afirmación de Kennedy en junio de 1963, ante la Puerta de Brandemburgo del Berlín dividido: «Ich bin ein Berliner». Bien diferente del toque de retirada de Trump/Vance de Múnich 2025, sobre el papel estratégico de Europa y de la Unión Europea en el tablero mundial de los diversos conflictos bélicos abiertos. 
Todo un recorrido de la geopolítica y de las guerras abiertas, que empezara casualmente, también, en Múnich en 1938 – con la entrega de Checoslovaquia, por parte de Chamberlain a Hitler–. De tal forma que algunos comentaristas, han fijado por ello, ya el orto y el ocaso del momento atlantista, y han dejado paso a afirmaciones tales como las del nacimiento de una 'Nueva época para Europa'. Aunque la Europa –parcial y relativa– convocada por Macron para celebrar una cumbre que replique el órdago americano se vea aquejada de una debilidad sostenida y de una falta de liderazgos continentales. Por ello, lo que parece evidente es la llegada de un momento similar al de 1945-1948. No solo de reconstrucción –de lo que quede de Ucrania o de Gaza–, sino de nuevos roles internacionales. La llegada de una nueva guerra fría. Lo iremos viendo.