Ayer termino la celebración de Fercatur. Un año más la caza tiene su momento de protagonismo en la provincia de la mano de Fecir y con el patrocinio de la Diputación provincial. Este esta edición Valverde anunciaba el centro de gastronomía cinegética, una apuesta más por el sector, y, además, la feria, ha servido de escaparte para el futuro Museo de la Caza.  El nuevo museo, aún non nato, ha cambiado de ubicación de la calle Postas, en el centro de la ciudad, a la ronda de Calatrava en pleno corazón del campus universitario. Ahora, se construirá en las instalaciones donde está actualmente el parque comarcal de bomberos. 
El 15 de febrero de 2022, Paco Cañizares, presentaba, como portavoz del PP, una moción al Pleno del Ayuntamiento, que ahora preside, para destinar el edificio de la antigua Delegación de Sanidad en la calle Postas a Museo de la Caza. Un año después, el 1 de febrero de 2023, la Junta y la Diputación recogieron el guante y el edificio fue cedido para ese uso por parte de la Junta con el compromiso de que la Diputación lo rehabilitaría para el referido Museo. 
Paralelamente a la decisión de la Diputación de construir el Museo en el viejo edificio de Sanidad, se tomaba también el acuerdo por el Servicio Contra Incendios y Salvamento, de trasladar el actual parque de bomberos de la ronda de Calatrava a una nueva parcela en la N-430, pegado a la ciudad, con el fin construir unas nuevas dependencias y también albergar a la empresa de extinción de incendios forestales. 
A cuatro meses de unas elecciones municipales de 2023 y donde las expectativas de PP, con Cañizares como candidato, le daban ganador, y, como se dice en el argot futbolístico: A Cañizares se la estaban poniendo al bote. Si resultaba ganador, como así sucedió, se encontraría con un Museo de la Caza que se construiría durante su legislatura en el sitio que él mismo y su partido habían decidido y propuesto. Por otro lado, el traslado del actual parque de bomberos dejaría expedita la zona de la ciudad entre el Rectorado y las facultades, a este lado de rondas, para poder unir ambas partes del campus universitario terminando de derruir la barrera que suponen las viejas edificaciones de Extramuros de Calatrava y Pozo de Santa Catalina. Todo ello, edulcorado, con un proyecto también en la zona de accesos a la Universidad por la calle López Bustos y que el PSOE le dejaba sin ejecutar, al punto de caramelo, por haberse dormido en los laureles. Y, además, una nueva construcción de las instalaciones del SCIS. Mejor imposible. Pero no ha sido así. Toledo 17, desde siempre, tiene una gran influencia sobre el Ayuntamiento
La Diputación siempre ha tenido un peso importante en las decisiones del sobre la capital. Lo hemos vivido en años anteriores con ejemplos tan claros como la ubicación de los pabellones del Ifedi y la ciudad Administrativa. En el primer caso, para aprovechar el antiguo pabellón ferial, que bien podía haberse destinado a usos deportivos y culturales para una de las zonas más populares y haber situado los pabellones de nueva construcción en el lado opuesto de la ciudad, junto al AVE y las zonas industriales, en lo que ahora es el Polígono Oretania. Algo parecido sucedió también con la ciudad Administrativa porque se construye con la finalidad del aprovechamiento del viejo y obsoleto edifico del antiguo Hospital Provincial, con una inversión que sobrepasará los 45 millones de euros. En ambos casos primó el interés económico de la Diputación a un ordenamiento urbano coherente de la capital. 
No parece de lógico que el poder de influencia de la calle Toledo 17 acabe definiendo los perfiles urbanos y económicos de la propia ciudad.  La Diputación sugiere, casi siempre en base a sus intereses económicos como institución, que no suelen coincidir en muchos casos con los intereses de la capital, ni con su planeamiento, y el Ayuntamiento acepta incondicionalmente como si eso fuese la solución perfecta.  Esta vez, Cañizares, ha cedido a la opinión de Valverde de volver a aprovechar unas viejas instalaciones, sin valor, para construir un Museo de la Caza y la Naturaleza en el lugar menos oportuno y donde más daño puede causar urbanísticamente a la ciudad. Apoyar la caza nada tiene que ver con organizar una ciudad.
Esta misma reflexión, sobre la influencia, realizada hace dos años, era aplaudida por las filas del PP desde la oposición y enervaba a los dirigentes del PSOE en la provincia, por ello no creo que hoy a PP y Vox le haga ninguna gracia oír que sucede lo mismo en la época de Valverde que en la de Caballero. No obstante, a lo que puedan pensar los actuales dirigentes del PP, la influencia de Toledo 17 en el Ayuntamiento se ha convertido en una realidad y va camino de incrementarse dada la composición y el peso de la coalición PP-Vox en ambas instituciones. Lógicamente, no me refiero a las coincidencias e influencias ideológicas sobre asuntos intangibles como pueda ser la fiesta nacional, la caza o la capitalidad de la provincia. Me refiero, a decisiones en el ámbito urbano o económico que condicionan el futuro de la capital y de sus habitantes.  
Lejos, muy lejos, se encuentran estas propuestas, como la del museo de la caza en la ronda de Calatrava, de la idea de recuperar la capitalidad que argumenta el PP. Con decisiones así, tomadas desde la perspectiva del aprovechamiento de un edificio, sin valor y que debía de ser derruido en su totalidad, no dejaremos de ser un pueblo mal organizado y cateto. 
El concepto de capitalidad que el PP propone para Ciudad Real y que repetidamente recuerda, con buen criterio, el alcalde, de que debemos de recuperar para satisfacción propia y de la provincia, no puede estar basado en un intangible y tiene que notarse en su planeamiento, en una ordenación urbanística acorde. La capital no puede ser objeto de intereses pasajeros marcados desde la calle Toledo. La Diputación tiene adquirido un compromiso con la ciudad y con la provincia de construir el Museo de la Caza y debe de cumplirlo, y, si el edificio inicialmente propuesto en la calle Postas no es válido para ello búsquense otras ubicaciones, pero no comentan tamaño error de situarlo entre las facultades y el rectorado.
Es más, el Ayuntamiento debe de pensar y trabajar en buscar una nueva ubicación de la Comisaría de Policía Nacional, situado en la calle López Bustos con ronda de Calatrava, para conseguir una buena conexión desde la ronda de circunvalación con la Universidad.