Cerca de 75.000 multas son las que puso la Dirección General de Tráfico (DGT) a vehículos que circulaban por carreteras de Ciudad Real durante el pasado año, según los datos que la propia DGT acaba de actualizar. Son algo más de 200 multas al día de las que unas 130 son por pisar el acelerador de más. Durante el año pasado se contabilizaron 33.500 infracciones detectadas por radares fijos y 15.000 más por radares móviles. Las primeras bajaron, mucho, y las segundas subieron, también mucho. De hecho, es la segunda cifra más alta de este tipo de infracciones en los últimos cinco años. Cada día, los radares móviles de la Guardia Civil cazan a 40 conductores.
Pero no solo suben las infracciones de conductores que circulaban por la provincia por ir más deprisa de lo permitido. El año pasado se batieron récords de multas a ciclistas, una decena; por desobedecer indicaciones de agentes, 130; por circular o carecer de seguro, más de 2.000 y, sobre todo, por ir sin la ITV. Como pasa con los conductores que se suben al coche sin seguro, los que lo hacen sin haber pasado la inspección técnica de su vehículo encadenan tres años seguidos en los que van al alza estas infracciones. Solo en 2023 se detectaron a más de 9.000 vehículos, casi el doble de los que circulaban sin pasar la ITV hace una década.
Y vuelven a subir otra vez, después de tres años descendiendo, las multas que se ponen a conductores que iban con el móvil en la mano. El año pasado fueron casi 900, la cifra más alta desde 2019 y eso pese a que en 2022, la nueva ley de tráfico 'encareció' la pérdida de puntos, hasta seis, por cometer esta infracción, que viene acompañada de una multa de 200 euros. Otro tipo de multas en la que han caído más conductores en la provincia que en otros años es la que se recoge bajo el epígrafe de 'comportamiento indebido', donde se incluyen desde no mantener una distancia de seguridad adecuada a circular con una carga mal asegurada o arrojar objetos a la vía que puedan causar accidentes. Así se pusieron 841 sanciones. Otro récord que, además, sitúa a Ciudad Real entre las diez provincias de toda España con más multas por comportamientos indebidos al volante.
Por encima del millar de sanciones aparece también en el balance de Tráfico el no uso del cinturón de seguridad y conducir sin carné. Capítulo aparte son las sanciones a conductores que circulaban tras consumir alcohol o drogas. Estas últimas se triplicaron en un año hasta alcanzar las 1.279. Desde 2016, solo una vez, en 2018, hubo más positivos por drogas. En cuanto a los que conducían con una tasa de alcoholemia positiva también superaron el millar: 1.029. Eso sí, fueron 200 conductores menos que al acabar 2022.