Amigo Sancho, espero que al recibo de ésta te encuentres bien. Yo bien, gracias  a Dios.
El pasado sábado, una vez más, el Club Deportivo Manchego volvía a perder un partido en los últimos minutos. 
Esta derrota es un paso atrás muy importante, pues ahora el equipo blanquiazul está empatado a puntos con el Villarrobledo en la zona de arrastre tras la sorprendente victoria del Pedroñeras con el Toledo.
Ahora viene una difícil etapa, así que hay que tener los pies en el suelo y, sobre todo, mantener una relación conjunta entre directiva, jugadores y aficionados que son los que llevan el peso de la nave azul por este proceloso mar. No sopla ningún viento a favor y ahí es donde echo de menos algún comentario de algún directivo que diga «no pasa ná, estamos en una mala situación, pero vamos a salir de ella, como otras veces ya se ha salido».
Reconociendo que el peso económico y administrativo lo lleva la junta directiva también es justo reconocer que el fiel aficionado necesitaría un impulso de quien fuere para que a su vez ese impulso se multiplicase y  ayudar a escapar definitivamente del peligro.
Este sábado nos visita el Huracán de Balazote y espero que jugadores y aficionados empujen la nave hasta un punto donde estemos protegidos de este proceloso mar por donde ahora está navegando el Manchego.
Bueno Sancho, nada más por hoy. Recibe un abrazo de éste tu amigo que lo es.