Un estudio realizado en el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo ha propuesto una nueva escala que mide de manera más integradora y precisa la evolución neurológica tras un daño medular.
Según ha informado la Consejería de Sanidad en nota de prensa, el estudio ha sido coordinado por el doctor Ángel Arévalo, se ha publicado en la revista 'Journal of Neurotrauma' y ha contado con la participación de los principales expertos mundiales del campo de la lesión medular.
La investigación de Arévalo, neurocientífico del Laboratorio de Neuroinflamación del Hospital de Parapléjicos, ha generado una escala de medir, llamada 'Integrated Neurological Change Score' (INCS), que enriquece con una visión más global y precisa la escala que se usa actualmente en todo el mundo para medir la evolución del daño medular.
Asimismo, ha confirmado cómo el juicio clínico sobre cuánto ha mejorado o empeorado un paciente se ajusta mejor a la INCS que a las puntuaciones que aporta el procedimiento estándar que se usa a nivel internacional.
En este sentido, el procedimiento más extendido consiste en una exploración neurológica que se conoce por sus siglas en inglés como 'ISNCSCI', que se traduce como Estándares Internacionales para la Clasificación Neurológica de la Lesión Medular, y evalúa la sensibilidad grosera (dolor, temperatura, entre otros), la sensibilidad fina, la motricidad de las extremidades superiores y la motricidad de las extremidades inferiores.
Arévalo ha explicado que a partir de estas cuatro evaluaciones, se obtienen cuatro puntuaciones distintas de sensibilidad y motricidad y se determina el nivel de lesión, que es el segmento de la médula espinal más caudal, el más bajo, en el que se preserva la sensibilidad y hay movimientos musculares útiles, antigravitatorios.
Esta exploración requiere de un entrenamiento del evaluador para que el resultado sea el mismo, independientemente del profesional que la realice o del lugar donde se haga, y se obtiene una fotografía del estado neurológico del paciente en un momento dado, lo que sirve para personalizar la terapia rehabilitadora.
Sin embargo, ha dicho que cada una de estas variables aporta una visión limitada del cambio en la función neurológica y con la INCS se integran "en un solo valor los cambios en las cuatro puntuaciones de sensibilidad y motricidad" y, por tanto, "en lugar de ver los trazos, se ve el cuadro completo".
El estudio ha llevado más de tres años de trabajo y ha dado como resultado "una herramienta más sensible y acorde con el juicio clínico para estudiar qué factores se asocian a la recuperación neurológica espontánea de los pacientes", según Arévalo.
A su juicio, permite inferir cambios en la recuperación neurológica y "puede sentar las bases para el desarrollo de la medicina personalizada en lesión medular" además de "mejorar la investigación" y hacer que los ensayos clínicos sean "más sensibles" y que se puedan ver efectos que con las herramientas actuales no se detectan