Tras las Juntas de Explotación de la semana pasada de las masas de agua subterránea Rus Valdelobos y Consuegra-Villacañas, hoy será el turno de las masas Mancha Occidental II y Sierra de Altomira, cuyos representantes mantienen su intención de no participar en el encuentro, tal y como pactaron las ocho masas del Alto Guadiana, al convocarse de forma telemática y no presencial.
Por lo que respecta a las dotaciones de agua de cara a la campaña que viene, la propuesta de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) para la masa Mancha Occidental II es que se mantengan en relación a este año, es decir, 1.800 metros cúbicos para los cultivos herbáceos y 1.350 para los leñosos. Así lo dio a conocer a este diario el presidente de la comunidad de usuarios, una de las más importantes de la provincia, dado que aglutina una superficie de más de 90.000 hectáreas de regadío y unos 9.000 regantes.
Para José Joaquín Gómez, su presidente, se trata de un volumen de extracciones para riego que no comparten, por lo que piden que se vuelva a los niveles que había en el año 2019, en concreto 2.000 y 1.500 metros cúbicos por hectárea. De este modo, piden revertir los recortes que se aplicaron para los años 2020 y 2021, que se suman a los que acumulan de forma histórica, puesto que sus derechos de riego superan los 4.200 metros cúbicos. Esa reducción se debe a la declaración de sobreexplotación del acuífero.
En este sentido, Gómez considera que «los recortes no sirven para nada» si no se contabilizan bien los recursos disponibles, del mismo modo que recordó que hay muchas explotaciones sin regularizar, agregando que está de acuerdo en que haya «un buen uso del agua por todos».
Para la nueva campaña, el organismo de la cuenca le ha trasladado a la comunidad de usuarios Mancha Occidental II el ligero descenso que se ha registrado en las reservas del acuífero. «Ha bajado ligeramente, pero está prácticamente como el año pasado», dijo Gómez al tiempo que comentó que no está del todo conforme con la manera de cuantificar los recursos disponibles en la masa al ubicarse los medidores de los niveles piezométricos «junto a pozos que están bombeando».
Por su parte, desde la Comunidad de Usuarios Sierra de Altomira, que abarca principalmente a municipios de Cuenca, pero también pequeñas zonas de las localidades ciudadrealeñas de Pedro Muñoz, Campo de Criptana y Alcázar de San Juan, las dotaciones que propone la CHG «son insuficientes» y denuncian el trato que se les da al ser «los eternos perjudicados» por la sobreexplotación que presentan otras masas, por lo que «no hemos podido desarrollar nuestros regadíos», apuntó su presidente, Rafael Rodrigo. El día 25 será el turno de la Junta de Explotación de la Masa I, donde se plantean las mismas dotaciones que en la masa II.