2024 no fue un buen año en siniestralidad vial. Con respecto al anterior, las carreteras y calles de la provincia de Ciudad Real registraron más accidentes de tráfico con víctimas (523), con más fallecidos (26), más heridos graves (57) y más heridos leves (675). Cifras, aún provisionales, facilitadas por la Jefatura Provincial de la Dirección General de Tráfico (DGT) a La Tribuna, y de las que se infiere que la seguridad al volante sigue siendo una asignatura pendiente para todos. En la región, el balance de fallecidos se cerraba en 82, menos que en 2023 (91) y similar al de los años 2020 a 2022.
En la provincia, durante 2024 se registraron 46 accidentes con víctimas más que en 2023 (un aumento del 9,47 %), con siete fallecidos más (36,8%), y un incremento de 11 heridos que necesitaron servicios hospitalarios (23,9%) y de 67 heridos leves (11%). De los 26 fallecidos contabilizados durante los doce meses del año, 25 perdieron la vida en vías interurbanas (10 en autopistas y autovías y 15 en vías convencionales).
Tres accidentes graves. Este sensible incremento de víctimas mortales con respecto al año anterior viene condicionado por tres accidentes graves en los que se registraron varios fallecidos: 2024 empezaba (25 de enero) con las impactantes imágenes del accidente múltiple en la A-4, a la altura de Santa Cruz de Mudela, donde la niebla fue la causa de un choque en cadena de numerosos vehículos, con el resultado de cuatro muertos en el momento y uno más que fallecía días después en el hospital; el 9 de mayo, también en la A-4, un matrimonio de avanzada edad perdía la vida en un choque en el término municipal de Membrilla; y el 16 de septiembre, en la A-43, un conductor kamikaze segaba la vida de un joven profesor, además de la suya propia.
Mal año en las carreteras: más siniestros y más fallecidos - Foto: Rueda VillaverdeEl último fallecido del año se registró el 28 de diciembre, en Agudo, durante la campaña especial de Navidad. Unas fechas que se saldaron con 19 accidentes y 27 heridos.
En cuanto al tipo de vehículos implicados, en los siniestros producidos en autovías o autopistas, siete de estos fallecidos viajaban en turismos, dos en camiones y uno más fue un peatón atropellado. Por su parte, en carreteras convencionales, seis personas perdían la vida en turismos, dos en furgonetas, uno en camión, otro más en un vehículo alternativo y cinco pertenecieron a lo que la DGT denomina vulnerables (un peatón, un ciclista y tres motoristas).
Donde no hubo que lamentar ningún fallecido fue en accidentes protagonizados por vehículos de movilidad personal (MVP), los patinetes eléctricos, con los que se contabilizaron 21 siniestros con víctimas, con el resultado de 21 heridos leves y uno que necesitó ingreso hospitalario; todos en vías urbanas.
Mal año en las carreteras: más siniestros y más fallecidos - Foto: Rueda VillaverdeEn lo que se refiere al tipo de accidente, el más repetido es la salida de vía en carreteras convencionales, en la mayoría de los casos por distracción, con un balance de ocho víctimas mortales. También son frecuentes, ya en vías rápidas, las colisiones traseras múltiples por alcance, que fueron la causa de seis fallecidos.Según este balance provisional de la DGT, el accidente tipo en la provincia lo protagonizaron los turismos, en carreteras convencionales, casi siempre por salida de vía, entre semana y en horario matinal (de 7 a 14 horas). Y un dato significativo: cinco de los 25 fallecidos en accidentes en carreteras no llevaban puesto el cinturón de seguridad.
Raquel García Fabra, jefa provincial de la DGT, lamenta que se haya producido un incremento en la siniestralidad vial, aunque explica que al ser Ciudad Real una provincia muy extensa, con muchos kilómetros de carreteras y muchos desplazamientos, «es muy difícil» bajar de los 20 fallecidos, por lo que se necesita una mayor «responsabilidad» del conductor, porque «muchos siniestros viales se pueden evitar». Y subrayaba ese dato de los cinco fallecidos que no llevaban el cinturón: «Una quinta parte es mucho».