El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Ciudad Real está trabajando para la creación de un espacio gastronómico en el interior del antiguo convento de las Madres Concepcionistas Franciscanas, conocido comúnmente como el de 'Las Terreras' por su ubicación y que fue adquirido por el Consistorio capitalino el pasado año por valor de 2,2 millones de euros.
Así lo han señalado este jueves la concejala de Turismo del Ayuntamiento de Ciudad Real, Cristina Galán, y el portavoz del equipo de Gobierno local, Guillermo Arroyo, quienes han ofrecido una rueda de prensa para desmentir las acusaciones del PSOE sobre el "proyecto inexistente" de remodelar el Mercado Municipal de Abastos para crear en su interior un espacio gastronómico.
Tanto Galán como Arroyo han reprochado al PSOE que "falten a la verdad" al afirmar que existía un proyecto para la remodelación del Mercado Municipal de Abastos y acusar al equipo de Gobierno de no querer llevarlo a cabo.
Para dar certeza a las denuncias del equipo de Gobierno, ambos ediles han mostrado diferentes informes de distintos servicios municipales del Ayuntamiento de Ciudad Real, como el de Urbanismo, que aseguran que no existe proyecto, al igual que el del servicio de Arquitectura, que señala que no es viable la creación de un espacio gastronómico en dicho inmueble.
En este sentido, ha avanzado que desde el Ayuntamiento se está trabajando en la creación de ese espacio gastronómico polivalente y centro de interpretación de la gastronomía en el antiguo convento de Las Terreras, para cuyo proyecto existe una subvención cercana al medio millón de euros para llevarlo a cabo.
Respecto al Mercado Municipal de Abastos, Galán ha indicado que desde el Ayuntamiento de Ciudad Real están elaborando un nuevo reglamento del inmueble con el objetivo de que vuelvan a ocuparse la treintena de puestos que, actualmente, se encuentran vacíos y sin utilidad.
Según la concejala de Turismo, encargada también del Mercado Municipal de Abastos, lo que los comerciantes de este inmueble necesitan es que se empiece a dar uso a los puestos vacíos, además de dotarlos de otros usos como venta de artesanía, comida para llevar o mercería.