La Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo maneja una previsión «bastante buena» para la campaña de verano, que dará continuidad a la evolución positiva experimentada por el sector en los últimos años, desde el punto de inflexión que supuso la pandemia de coronavirus. Confirma, asimismo, los datos positivos registrados en el arranque de 2024. Hay que remontarse a 2009 para encontrar un inicio de curso tan prometedor.
«Ciudad Real es un destino atractivo y cada vez viene más gente», enfatiza el presidente de los hosteleros, Juan Daniel Rubia, que apunta a la rentabilidad como gran objetivo del sector. Con los costes disparados en los últimos años, los márgenes de beneficio se han estrechado, lo que «dificulta poder reinvertir en los establecimientos para ofrecer un mejor servicio». La dificultad para encontrar profesionales cualificados es otro de los caballos de batalla, en un escenario actual en el que «hay más oferta de empleo que demanda». Avanza, en este sentido, que la asociación trabajará con la Junta de Comunidades en la formación de jóvenes para su posterior incorporación al mercado laboral.
El turismo rural volverá a tirar del carro en la provincia un verano más, con los hoteles pendientes de las reservas de última hora. Un cambio de tendencia, precisa Rubia, que afecta a todo el territorio nacional. Las cada vez menos reservas que se hacen con antelación están vinculadas a eventos o actividades, como, por ejemplo, el Festival de Almagro, que ha vuelto a poner el cartel de 'completo' en los establecimientos de la localidad encajera y que también beneficia a alojamientos de otros municipios cercanos, especialmente a los hoteles de Ciudad Real. Sobre la capital, el presidente de los hosteleros destaca el elevado número de eventos organizados hasta la fecha, con la Pandorga y la feria en el horizonte. «Beneficia al sector y también a los ciudadanos, que cuentan con una amplia oferta cultural, deportiva y de ocio», apostilla.