La cooperativa Santa Catalina de La Solana se prepara ante una campaña de uva que no se generalizará hasta entrado septiembre, pero que en realidad ya está en marcha. De hecho, la recepción para de varietales ya ha comenzado y a estas alturas de agosto ya ha llegado a la bodega más de un millón de kilos de uva, el doble que el año pasado por estas fechas. Se espera una cosecha más que decente, con un ligero aumento de la producción y una excelente calidad del fruto, siempre que no haya reveses climáticos de última hora.
Así se dio a conocer en la última asamblea general, donde los socios tenían que aprobar las normas de campaña, que este año introducen una novedad importante: el socio podrá completar su cupo obligatorio de uva como estime conveniente, sin diferenciar entre blanca y tinta. El presidente de la entidad, Pedro José Martín-Zarco, estima que habrá alrededor de un 15 por ciento más de cosecha que el año pasado, que redundará en un aumento de la molturación. "El año pasado molturamos 36 millones de kilos y este esperamos sobrepasar los 40 millones". Basa su previsión en dos factores: más uvas en las viñas y el compromiso que del socio. "Con las liquidaciones que hemos dado y la apuesta que están demostrando los socios hacia su cooperativa, creo que superaremos esa cifra".
Sin estocaje
Martín-Zarco está tranquilo ante una avalancha de uva porque la bodega está prácticamente vacía y hay almacenaje más que suficiente. "El año pasado teníamos 15 millones de litros por retirar y ahora mismo apenas tenemos medio millón". "Los depósitos están vacíos y los equipos de molienda en los jaraíces están preparados", subraya. Se prevé que la campaña se generalice la próxima semana para la uva tinta y alguna partida de secano en blanco airén, aunque el grueso de cuadrillas no arrancará hasta el lunes 9 de septiembre.
El presidente informó de la liquidación de uva, un asunto de máximo interés para los socios. Admitió que la uva tinta no ha tenido su mejor año, ya que se ha pagado el tinto 'selección' a 3,40 pesetas grado, el syrah a 3,50 y el tempranillo normal a 3 pesetas. Los blancos han tenido mejor comportamiento, pagándose a 4,70 la variedad airén en su precio más alto, el macabeo a 4,60, el ecológico a 4,65, el moscatel a 4,70, el sauvignon a 5,10 y el chardonnay a 5,60.
Un espumoso en el horizonte
Preguntado por las novedades que pueda haber en cuanto a nuevos caldos, Pedro José Martín-Zarco reveló que el objetivo es sacar al mercado un vino espumoso. "Es un empeño del Consejo Rector y casi una obligación para la cooperativa, a ser posible para este mismo año", afirmó.
Otro punto relevante de la asamblea fue la modificación de los estatutos de la nueva cooperativa de segundo grado Frutos Secos Manchegos, recién constituida junto a sus colegas de 'El Galán' de Membrilla. Finalmente, se aprobó que el pistacho y la almendra conformarán una sección independiente respecto a la uva y la aceituna.