Durante 20 minutos sonaron en la plaza Mayor una tras otra el nombre, la fecha y el autor de cada uno de los 42 crímenes machistas ocurridos en el país durante este 2024 y también el de los ocho menores asesinados por la violencia vicaria. La Asamblea de Mujeres Feministas quiso mostrar así el crecimiento de la violencia contra la mujer en este 2024, recordando también a aquellos hombres que tendrán que responder «ante la justicia y la sociedad» por estos asesinatos y también a aquellos que se suicidaron antes de tener que responder de su crimen. «Somos la voz de las silenciadas, estamos hartas de que nos asesinen», dijo una representante de la asamblea en el escenario como cierre de este acto simbólico en el que se encendieron también velas y que  marcó la protesta de este año de la organización en la capital.  

La portavoz de la Asamblea de Mujeres Feministas, Fátima Romero, explicó que el motivo de conmemorar este día así surge ante el aumento de la violencia machista, que en opinión de la organización, tiene un culpable: «El negacionismo», aunque «todas las cifras que sean mayor de cero es terrible, es inadmisible». «Se está invisibilizando la violencia machista, la violencia contra las mujeres y se están recortando recursos», dijo Romero alertando de que lo invisibilizado «no existe» y señalando de forma directa al cambio de nomenclatura de la unidad de violencia de género del Consistorio y su inclusión en otra que atienda todas las violencias. «La violencia tiene unas causas específicas y los profesionales tienen que tener una formación específica para ello», señaló Romero ante quienes dicen que solo es un cambio de nombre.

Por este motivo, la propuesta y la jornada se realizó con el lema 'Hartas' y con un recordatorio: «El machismo mata, el feminismo no». Ese hartas se dirigió a través del manifiesto a los asesinatos a la violencia sexual o la educación sexual «a través de la brutalidad y violencia que ven en la pornografía» los jóvenes. También hartas del negacionismo, ante el que pidieron «tolerancia cero». «Denunciamos la eliminación de recursos imprescindibles, como la unidad de violencia de la Policía Local y la censura de las voces de mujeres sobrevivientes del sistema prostitucional», recogió el manifiesto, recordando el otro hecho ocurrido en la capital y que ha sido denunciado este año. «¿Qué sucedería en la sociedad si 50 hombres fueran asesinados por sus mujeres cada año, uno tras otro?», se preguntaron en la lectura, donde se pidió reflexionar ante la situación de las mujeres en zonas de guerra y también ante «la responsabilidad como sociedad, porque quienes callamos generamos pasividad». 

Más fotos: