Novedades en el caso del doble crimen de Manzanares, perpetrados presuntamente por el empresario Antonio Caba. Por iniciativa de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Manzanares ha decidido añadir un tercer investigado más a la causa, que se sumaría al propio Caba y a su socio Gaspar Rivera, ambos en prisión provisional desde marzo de 2023. Se trata de Juan Carlos S. L. F., un gestor, conocido de Antonio Caba, y a cuyo nombre de una de sus empresas estaba registrada la finca en la que aparecían los restos de una de las víctimas, Juan Miguel Isla, en el término municipal de Valdepeñas.
Este tercer implicado, que ya declaró ante la jueza en calidad de testigo, lo ha vuelto a hacer ya como investigado y con asistencia legal. Lo hizo el pasado 6 de mayo y se le acusaría de un delito de encubrimiento, al haber ocultado, supuestamente, información importante para que la UCO pudiera relacionar esa finca en cuestión con su verdadero propietario, Antonio Caba.
Su abogado, Rodrigo López, explica a La Tribuna que es cierto que su cliente, en un principio, no advirtió a la Guardia Civil que esa finca, que estaba a nombre de una sociedad suya, era realmente propiedad de Antonio Caba, algo que la UCO interpretó como un intento de obstruir la investigación. «Se le preguntó qué fincas estaban a su nombre que podrían tener relación con Caba, y él admitió que tres, obviando ésta, porque realmente no estaba a su nombre, sino a nombre de una de sus sociedades», argumenta el letrado de Juan Carlos S. L. F., quien asegura que su representado «no la consideraba suya, no tenía ni las llaves ni sabía dónde estaba ubicada; sólo le hizo un favor a Caba por unos problemas de éste con Hacienda, poniendo la finca a nombre de su sociedad».
Además, a este tercer investigado se le relaciona con Antonio Caba porque abrió una cuenta bancaria a su nombre, pero para que la utilizara el principal acusado, así como por el hecho de que el vehículo que éste utilizó y que siguió la Guardia Civil, un BMW X5, también estaba a su nombre.
Por otro lado, Juan Carlos S. L. F. también llegó a comprar a Antonio Caba un terreno que antes fue de Juan Miguel Isla, aunque, según su abogado, engañado por un contrato de compraventa con la firma falsificada de uno de los dos empresarios fallecidos.
«No tenemos nada que ocultar. Mi cliente fue una víctima más de Antonio Caba, al que conocía desde hace tiempo y al que quiso hacerle algunos favores».
Aunque las acusaciones particulares solicitaron su prisión provisional tras su declaración como investigado, la jueza se oponía a ello, por lo que en la actualidad se mantiene en libertad, al contrario que los otros dos investigados, Antonio Caba y Gaspar Rivera.