La Policía Nacional ha arrestado a dos personas en Ciudad Real, bajo la acusación de tenencia ilícita de armas, tras una violenta confrontación entre dos familias de la localidad que resultó en un herido a causa del lanzamiento de un objeto contundente.

Los disturbios tuvieron lugar durante la tarde-noche del 12 de agosto, cuando varios miembros de una de las familias se dirigieron a un domicilio en la calle San Antón, residencia de la familia con la que mantienen un conflicto prolongado, con la intención de resolver sus diferencias. La situación se volvió cada vez más tensa, y cuando las fuerzas policiales llegaron al lugar, se encontraron con una pelea masiva entre los miembros de ambas familias, quienes se lanzaban todo tipo de objetos, incluyendo piedras, adoquines y vasos de cristal.

Mientras los agentes intentaban calmar la situación, observaron a un individuo conocido por su historial delictivo asomado en una ventana del edificio, portando un arma de fuego con la que realizó un disparo hacia la calle. Afortunadamente, el disparo no alcanzó a nadie. A consecuencia de la pelea, un hombre tuvo que ser trasladado al Hospital General, donde, tras ser suturada una herida en su oreja, fue dado de alta.

Dos detenidos por una reyerta entre clanes en San Antón - Foto: Rueda Villaverde

Arma recuperada

Durante la noche, la Policía efectuó tres registros en el bloque de viviendas, lo que llevó a la detención de dos hombres y a la incautación de la pistola utilizada en el disparo, que estaba cargada y lista para ser usada. La investigación sigue en curso, ya que durante la madrugada se produjo un incendio en una de las viviendas de la calle San Antón, habitada por una de las familias implicadas, lo que sugiere que podrían producirse más detenciones. Además, la Comisaría de Ciudad Real ha implementado un dispositivo de seguridad en la zona para prevenir nuevos conflictos.

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El arma empleada en el tiroteo ha sido recuperada por las autoridades, que han detenido a dos personas presuntamente involucradas en los hechos. Sin embargo, la situación se agravó cuando, en represalia, integrantes del otro clan implicado provocaron un incendio en una vivienda cercana. Aunque no se han reportado víctimas mortales ni heridos graves, los daños materiales han sido significativos.