La delegada de la Junta de Comunidades en la provincia, Blanca Fernández, ha valorado el equilibrio, el respeto y la compatibilidad de las instalaciones de energías renovables existentes en la provincia de Ciudad Real con el cuidado de la avifauna y las actividades tradicionales como son la agricultura y ganadería. Blanca Fernández ha realizado estas declaraciones en Porzuna, donde ha podido conocer las diferentes medidas compensatorias que llevado a cabo la empresa Naturgy en las plantas fotovoltaicas Picón I, Picón II y Picón III desde su puesta en funcionamiento en el año 2019 con el objetivo de mejorar el entorno ecológico a través de la protección y conservación de la flora y la fauna de la zona. Allí ha recordado el potencial que tiene Castilla-La Mancha, y en este caso la provincia de Ciudad Real en el campo de las energías renovables "porque el presidente del Gobierno regional, Emiliano García-Page, decidió hace algunos años que ésta era una prioridad", tal y como demuestra el hecho de que "hayamos pasado de ser una región y una provincia energéticamente dependiente a ser autosuficiente". En este sentido, Blanca Fernández ha dicho que es un motivo de "orgullo" estar a la cabeza en producción de energías limpias en una provincia que produce aproximadamente 1 de cada 5 megavatios de los que se generan en España, "un país que es prácticamente el mayor productor de energías limpias en el mundo".
De hecho, la responsable del Ejecutivo regional ha ofrecido un dato que es revelador. "Si la provincia de Ciudad Real fuera una isla, se podría autoabastecer con la energía limpia que genera, y todavía podríamos vender", al detallar que el 82 por ciento del mix energético en la provincia procede de energías limpias, y de ella, más del 60 por ciento de energía solar, que es la más limpia de todas", informó el Gobierno regional en un comunicado.
Por ello, la delegada de la Junta ha reivindicado que "tenemos que ser respetuosos con la actividad tradicional, que es la que nos ha traído hasta aquí y es la que nos tiene que seguir llevando hasta el futuro, porque si no fuera por la actividad agroalimentaria, Castilla-La Mancha no tendría los datos que tiene en materia de exportaciones, pero, al mismo tiempo, no hay que olvidarse de que las energías limpias son las que nos garantizará esa sostenibilidad de ese planeta que queremos dejarle como legado a nuestros hijos e hijas".
La Junta conoce uno de los mayores complejos fotovoltaicosEntre las medidas de protección de la naturaleza, cabe destacar la instalación de 24 postes con cerca de una treintena de cajas nido, diez posaderos para aves rapaces, la reforestación de encinas o un proyecto con la especie cernícalo primilla en el silo de Porzuna que han favorecido la presencia de la avifauna e, incluso, "contribuyen a que recuperemos especies que no estaban en extinción, pero sí bastante mermadas". La delegada de la Junta ha explicado que este tipo de instalaciones de energías renovables en Castilla-La Mancha están obligadas a cumplir una ley medioambiental con múltiples requisitos y a ejecutar medidas compensatorias para suavizar el impacto ambiental, "y a lo largo del tiempo, aun estando ya instaladas, tienen que seguir trabajando en pro de la sostenibilidad, porque esa es la filosofía de las energías limpias y renovables, ya que si es bueno para el ecosistema, es bueno para el conjunto de la ciudadanía".Por otro lado, Blanca Fernández
Para finalizar, la delegada de la Junta de Comunidades en Ciudad Real ha incidido en la compatibilidad de estas actividades, algo en lo que "estamos trabajando en ello permanentemente tanto las empresas como la propia administración desde un buen entendimiento y desde un compromiso social, medioambiental y con el territorio".
La mayor planta de Castilla-La Mancha en su construcción
La Junta conoce uno de los mayores complejos fotovoltaicosLa delegación institucional encabezada por Blanca Fernández, delegada de la Junta en Ciudad Real, acompañada por Casto Sánchez, delegado provincial de Desarrollo Sostenible; Carlos Jesús Villajos, alcalde de Porzuna, y diversos técnicos de la Consejería de Desarrollo Sostenible de Castilla-La Mancha ha visitado el complejo fotovoltaico de Porzuna con el objetivo de conocer el funcionamiento de sus tres plantas solares, denominadas Picón I, Picón II y Picón III, la generación de estas desde su entrada en operación, y las diferentes medidas que se han ido realizando para mejora del entorno ecológico y funcional. Estas tres instalaciones, de 50 MWp de potencia pico y 151.452 módulos cada una, forman un complejo con una potencia total de 150 MW y 454.356 módulos. Así, el conjunto de estas 3 plantas solares se convirtió, en el momento de su puesta en marcha, en el mayor complejo fotovoltaico de Castilla-La Mancha, informó Naturgy en un comunicado.
Naturgy invirtió 100 millones de euros en la construcción de este complejo de energía solar que entro en servicio en septiembre de 2019 generando 450 puestos de trabajo. En conjunto, las tres plantas fotovoltaicas están produciendo 310 GWh al año, lo que equivale al consumo eléctrico anual de 88.500 viviendas, superior al consumo eléctrico de los habitantes de los términos municipales cercanos tales como Porzuna, Malagón, Picón y Piedrabuena. Este complejo incorpora medidas innovadoras de carácter tanto tecnológico como medioambiental. Para la conservación de la flora, se ha realizado la adecuación paisajística con la plantación en los espacios libres dentro de la planta y la forestación de 2,5 hectáreas de encinas.
En lo que respecta a la fauna, se ha creado un proyecto de hacking de cernícalo primilla en el silo de Porzuna, con una duración de cinco años y en colaboración con Fomecam, Grefa, el Ayuntamiento local y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, que está mostrando muy buenos resultados, y que también visitó esta delegación. Además, en las plantas de Picones se han instalado y se mantienen un total de 24 postes con 28 cajas nido y 10 posaderos para aves rapaces, que están favoreciendo la presencia de avifauna en las plantas y su entorno.
Un gran ejemplo de valor compartido es lo que ocurre en las plantas de Porzuna, donde cinco pastores siguen realizando, como venían haciendo antes, sus labores de pastoreo en el interior de las instalaciones. Se ha acondicionado el recinto con accesos nuevos para que las ovejas puedan entrar a las instalaciones de una manera más fácil, incluso se les facilitó una tarjeta de acceso a los ganaderos para que entren libremente al interior del recinto. Así mismo, ya pueden dejar a los rebaños por la noche en un recinto cerrado, si así lo desean, convirtiéndose en una especie de "guardería" donde dejar los rebaños.
Desde la construcción de la planta y durante estos años de explotación se está realizando un seguimiento exhaustivo de avifauna en el interior de las plantas y el entorno inmediato de ellas, lo que permite tener un conocimiento preciso de lo que ocurre en este tipo de instalaciones, permitiendo que con las acciones adecuadas, compatibilizar la actividad y la biodiversidad en ellas. En este sentido, se realizan constantes acciones formativas al personal en materia de concienciación sobre las aves esteparias y cualquier ave nidificante en suelo, y se ha implementado un protocolo interno para mejorar la protección de las aves nidificantes en el interior de la planta.
Apuesta por Castilla-La Mancha
La construcción de Picón I, Picón II y Picón III forma parte de los 250 MW adjudicados en las subastas de potencia renovable de 2017, que ha permitido a la compañía hacer una gran apuesta por esta tecnología en Castilla-La Mancha, la Comunidad Autónoma donde Naturgy ha inscrito el mayor número de proyectos y potencia fotovoltaica.
Además de este complejo solar, Naturgy tiene en funcionamiento en Ciudad Real la planta solar fotovoltaica La Nava, situada en los términos de Almodóvar del Campo y Puertollano, con una potencia de 49 MW y una inversión de más de 34 millones de euros, así como la planta Carpio de Tajo (El Carpio de Tajo, Toledo), con una potencia de 50 megavatios (MW) y una inversión de 33 millones de euros; y en Guadalajara la planta solar fotovoltaica Canredondo, situada en el municipio del mismo nombre, con una potencia de 22 MW. Adicionalmente, la compañía tiene en operación otra instalación de la misma tecnología, Toledo PV, en La Puebla de Montalbán (Toledo), la más antigua de Europa, ya que comenzó a funcionar en 1994 con una potencia pico de 1 MW y que este año cumple sus veinticinco años desde su puesta en funcionamiento.
Cabe destacar la inversión más de 76 millones de euros en las instalaciones de Zorita I y Zorita II, en Guadalajara, y Ocaña, en Toledo, que incrementarán en 150 MW la potencia renovable en la región. Las nuevas plantas producirán en torno a 310 GWh de energía al año y contribuirán a evitar la emisión de más de 172.000 toneladas anuales de CO2. Entre las fases de construcción y operación se generarán más de 1.000 puestos de trabajo.
Además, en Castilla-La Mancha, Naturgy cuenta con nueve parques eólicos que en 2018 generaron 540GWh, lo que supone cubrir las necesidades eléctricas de unas 200.000 viviendas, y evitaron lanzar a la atmósfera 170.000 toneladas de CO2.
Impulso a las renovables
Naturgy gestiona en la región otros 20 proyectos de energía renovable con los que prevé añadir 1.000 MW nuevos de potencia. Se trata de cinco proyectos de almacenamiento con baterías hibridados con energía solar; 12 proyectos para hibridar parques eólicos con tecnología fotovoltaica y tres para hibridar tres centrales hidroeléctricas con energía solar. Proyectos que se encuentran en distintas fases de tramitación y que contribuirán a reforzar la calidad del suministro del sistema eléctrico español, permitiendo una mayor introducción de energía renovable en la red. Las hibridaciones con baterías de PICON I, II y III se prevé que queden autorizadas antes de fin 2024.