El equipo de Gobierno de Tomelloso volverá a llevar a Pleno el proyecto del futuro crematorio para subsanar un error del pliego de condiciones. «Queremos llevar todo en orden para que no haya ningún tipo de error ni impugnación que eche para atrás la adjudicación» de un servicio «muy demandado» por la ciudadanía.
En junio, en sesión plenaria, se aprobó un acuerdo en relación con la segregación de la parcela en la que se construirá, perteneciente a una finca de titularidad municipal, de 18.800 metros cuadrados, ubicada en la zona del cementerio. En concreto, se segrega una parcela de 700 metros cuadrados, que linda por el este con el camino de Campo de Criptana para la construcción de estas instalaciones, además de otra de 1.302 metros cuadrados, para alineación del Camino de Alcázar.
Fue uno de los pasos previos para que la iniciativa eche a andar, pero de momento el próximo miércoles, 20 de noviembre, volverá a someterse a votación plenaria para corregir un error en el pliego de condiciones que conlleva una vigencia de 30 años. Pasado este tiempo, en el que se habrá amortizado la inversión, el edificio revertirá al Ayuntamiento, comenta el alcalde, Javier Navarro, quien manifiesta que el canon está por debajo de los 10.000 euros, ya que el objetivo es «prestar un servicio con garantía de calidad».
Un servicio funerario que no se está prestando en un municipio como Tomelloso, lo que obliga a que los vecinos tengan que desplazarse a otras localidades como Alcázar de San Juan o Villarrobledo (Albacete) para incinerar a sus seres queridos. «No se entendía que en la localidad no hubiera un crematorio, por lo que la intención del Ayuntamiento no es prestarlo como tal, sino facilitar que un privado lo pueda gestar», sentencia.
Un paso más para que este proyecto sea una realidad es la constitución de un derecho de superficie para la construcción del crematorio, mediante procedimiento abierto, tramitación ordinaria y una pluralidad de criterios de selección.
Navarro, en declaraciones a La Tribuna, reconoce que la localidad «tiene una carencia de prestación de servicios importantes en materias que no dependen del Ayuntamiento como es, por ejemplo, en el transporte, con la inexistencia de conexiones ferroviarias o con un Palacio de Justicia que no echa a andar. Pero luego hay otros servicios que pueden ser implantados por un privado o por un Ayuntamiento, a los que hay que darles cierta soltura, agilidad y comodidad para facilitar su ejecución, y el futuro crematorio es uno de ellos en el que el Consistorio pone la parcela para su construcción».
De tal forma, que de cumplirse con los plazos, confía en que el proyecto esté adjudicado en el primer semestre de 2025, año en el que se espera también que comiencen las obras. Este proyecto, enfatiza Navarro, no solo no costará ni un euro a los tomelloseros, sino que además reportará un beneficio económico a la localidad, porque la empresa adjudicataria se hará cargo de la construcción y de la explotación del servicio por un periodo de treinta años. Una vez resuelta la licitación y adjudicado se espera que las obras tengan una duración de año y medio.
Es una de las iniciativas que verán la luz en un futuro, aunque otras lo harán de forma más inmediata, como las obras de las urbanizaciones del Polígono 30, que «ya se ha presentado la alternativa técnica», y la del Polígono 25, que «estamos en plazo de presentación de alternativas jurídicos económicas» y «en breve» se comenzará con la construcción de la pista de conductores y continuará con el proyecto de musealización de la Casa del Gallego.