Barcelona tomará el relevo este martes a Toledo como ciudad anfitriona de la Gala de la Guía Michelín 2024, a la que la región llega con la expectativa de ver si sumará alguna estrella más a las 13 con las que cuentan los 11 restaurantes castellanomanchegos reconocidos por la prestigiosa guía.
Los últimos en llegar, el año pasado en la gala que tuvo lugar en Toledo, fueron Oba, el proyecto de Javier Sanz y Javier Sahuquillo tras Cañitas Maite en Casas Ibáñez (Albacete); Ababol, de Juan Monteagudo, ubicado en Albacete capital; y Ancestral, de Víctor Infantes, que ha hecho a su cocina manchega merecedora de esta distinción en la localidad de Illescas.
Sumando las ya citadas, Albacete suma tres restaurantes y cuatro Estrellas, ya que a Oba y Ababol hay que sumar a Maralba (Almansa), de Fran Martínez, que cuenta con dos estrellas.
Toledo, con la Estrella que luce desde hace un año Ancestral, suma otras cinco, contando con las dos de Iván Cerdeño en su restaurante homónimo; la de Pepe Rodríguez en El Bohío, también en Illescas; y la de Carlos Maldonado en Raíces (Talavera de la Reina).
Guadalajara tiene, por su parte, otras dos Estrellas, las dos en Sigüenza, concretamente en El Doncel de Enrique Pérez y en El Molino de Alcuneza de Samuel Moreno.
Mientras, Ciudad Real atesora otras dos, en la figura de Miguel Ángel Expósito en Retama y de José Antonio Medina en El Coto de Quevedo.
Finalmente, con la salida de Jesús Segura el año pasado de la lista, Cuenca no cuenta actualmente con ninguna Estrella Michelín.