«Los chicos que empiezan no pueden estar en cualquier mano»

L.G.E.
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Luis Casimiro es uno de los entrenadores que más partidos ha dirigido en la ACB, pero recuerda especialmente su trabajo con los más pequeños: «Algo hice bueno cuando esas personas, que en su día eran niños, lo agradecieron en su formación»

Luis Casimiro es de lo entrenadores que más partidos ha dirigido en ACB - Foto: Pablo Lorente

Castilla-La Mancha es este 2024 Región Europea del Deporte. En La Tribuna queremos contribuir también con nuestro granito de arena a la conmemoración de este año y por eso hemos contactado con una treintena de castellanomanchegos vinculados con el deporte para que nos cuenten desde dentro cómo es su mundo y qué lecciones podemos sacar de su experiencia. A lo largo de este mes de junio podrán leer cada día los testimonios de deportistas de élite, de los que están empezando y de los que acaban de dejarlo, de quienes han sido olímpicos o paralímpicos y de quienes lo serán en solo unas semanas en París, de quienes son entrenadores, directores deportivos, guías o incluso seleccionadores.

«Los chicos que empiezan en un deporte no pueden estar en cualquier mano»

Le ha pasado al volver a Puertollano, cuando ha coincidido con hombres a los que en su día los tuvo de chavales en alguna escuela de baloncesto y se acordaban de él y de lo que les enseñó. «Yo intenté meterles el baloncesto, que se involucrasen», cuenta Luis Camisiro, «y algo hice bueno cuando estas personas que son mayores, que en su día eran niños, lo agradecieron en su formación como persona». Eso que se llevaron del baloncesto fue desterrar la palabra egoísmo y abrazar la del compañerismo. «Lo han aplicado mucho en su vida y les ha ayudado muchísimo a la hora de estar en el trabajo, por ejemplo, de tener ese espíritu de nunca rendirte aunque las cosas vayan mal porque este partido lo podemos ganar», apunta. Casimiro cuenta que no todo el mundo puede llegar ni siquiera a semiprofesionales, pero cuando tiene este tipo de encuentros y ve hasta qué punto los valores del baloncesto han pasado a formar parte de la vida de una persona, siente que la «misión está cumplida».

Esa sensación la tiene alguien que es historia de la ACB. Empezó como jugador de baloncesto, pero sus éxitos le llegaron como entrenador, siendo uno de los que más partidos ha dirigido en la máxima categoría, al frente de nombres como Estudiantes, Unicaja Málaga o TDK Manresa, con quien ganó la liga. 

«El deporte para mí significa muchísimo, me ha dado un estilo de vida, donde esos valores que te transmiten desde pequeño han estado ahí», explica. En su caso comenta que las perspectivas van cambiando. De niño «juegas como un hobby» y luego ese deporte le llevó a forjar su vida profesional.

Señala que un deporte colectivo como el baloncesto enseña muchos valores, como el compañerismo. «Es compartir muchas cosas, desde un balón a muchas vivencias como grupo, como equipo», expone. También comporta generosidad, «a la hora de ofrecer tu esfuerzo en función del equipo». Le suma además la humildad.

Casimiro nota un gran avance en instalaciones para la práctica deportiva, pero cuando se trata de los más pequeños reclama un salto en la preparación de esos entrenadores y no solo habla de conocimientos técnicos, sino también de «calidad humana». «Los chicos que empiezan cualquier deporte no pueden estar en cualquier mano», esgrime, «estamos hablando de la formación de personas».