La Policía Local de Ciudad Real ha iniciado esta semana una nueva campaña de vigilancia intensiva de la velocidad en el casco urbano de la capital, lo que significa que habrá controles en diferentes puntos durante los próximos días. Se trata de una iniciativa que busca concienciar sobre la velocidad a la que se circula por las vías urbanas, donde, por ejemplo, ayer hubo 30 vehículos de 600 controlados, que superaron «en mucho» la velocidad máxima y que serán sancionados.
Esta cifra implica que un 5% de los vehículos controlados supera los límites de velocidad y lo hace en cifras excesivas, porque teniendo en cuenta el posible margen de error de los radares se opta por elevar la propuesta de multa solo cuando hay una superación clara de estos márgenes, no cuando se está ligeramente por encima de 50 o de 30 kilómetros por hora en función de la vía. En este sentido, las fuentes policiales indicaron que el dato de los que superan es mayor, pero no llegan a esas velocidades.
Estas cifras que se han obtenido son similares a las que se han dado en otras campañas de control, como las que se realizaron a petición de la Dirección General de Tráfico hace unas semanas y donde los porcentajes de sanciones fueron similares en las calles de la capital, explicaron.
Las mismas fuentes de la Policía Local de Ciudad Real recordaron que el hecho de iniciar una campaña de control de velocidad, no implica que no se salga con el radar a hacer labores de vigilancia en otras ocasiones a lo largo del año. La diferencia está en la intensidad de estos controles y que se harán en numerosos espacios de la ciudad, al menos esta semana. Igualmente, indicaron que son muchos los días que hacen campañas de vigilancia de alcohol y drogas, este último un aspecto que va en aumento en la ciudad, como demuestran los positivos en los controles.
Por último, pese a que se den estas sanciones por superar el límite de velocidad, aún no ha habido conductores que se hayan convertido en delito, tipificado así en el código penal en el momento en que se superan en 60 kilómetros por hora el límite máximo de velocidad, lo que equivaldría a circular por ronda y avenidas a 100 o en otras vías de la capital a 90.
La Policía Local cuenta con medios de control de velocidad móviles, normalmente ubicados en un vehículo. Esto hace que haya diferencias en cuanto al número de vehículos controlados, en función del día o la hora, y que sea difícil conocer, por ejemplo, qué lugar de la capital es donde menos se respetan los límites máximos.