La Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) cuenta para el presente curso 2024-2025 con un presupuesto de 2,6 millones de euros para los programas de movilidad, medio millón más que el anterior. Entre todos ellos sobresale el Erasmus, que 'alista' cada año a cientos de miles de estudiantes europeos y de terceros países asociados a este programa, del que también se benefician docentes e investigadores y el personal de administración y servicios.
Este curso, como principal novedad, las becas presentan un incremento líneal de 50 euros para hacer frente al alza de la inflación. La cuantía total, explica el vicerrector de Internacionalización, Raúl Martín, depende del destino. Así, a los estudiantes Erasmus de larga duración (cuatrimestre o curso completo) del grupo 1 les corresponden 400 euros al mes. Son países con un coste de vida medio más alto, como Alemania, Francia, Suecia, Dinamarca, Italia o Países Bajos. Alos del grupo 2, donde se encuentra España, 350 euros; y a los del tercer grupo (Bulgaria, Croacia, Polonia, Turquía...), un total de 300. «Hay becas de 700 euros para otros países del resto del mundo, pero las movilidades aquí son menos», apunta el representante de la institución académica.
Las movilidades de corta duración, que se extienden un mes como máximo, están dirigidas a estudiantes de doctorado, docentes y personal técnico de gestión y administración de servicios. Para estos últimos, la beca sólo cubre cinco días, mientras que para los profesores y doctorandos alcanza toda la estancia en el exterior. Hasta el momento, la cuantía ascendía a 79 euros al día hasta el 14, y bajaba a 56 a partir del 15.
Transporte.
Además, este curso se articulan por primera vez ayudas para el transporte del país de origen al de destino. La cuantía aumenta en función de la distancia. Otra variable es la contaminación: el estudiante recibe más dinero, si opta por un medio de transporte más ecológico que el avión. Alas cantidades mencionadas con anterioridad, subraya Martín, se suman otras mensuales si el objeto de la movilidad es hacer prácticas (150 euros) o si el estudiante está incluido en la categoría de 'menos posiblidades' (250 euros), que contempla casos de discapacidad, obstáculos socioeconómicos y geográficos o problemas de salud.
Los programas de movilidad de la Universidad de Castilla-La Mancha impulsan el intercambio de un gran número de estudiantes y resultan muy enriquecedores para su formación académica y personal. En concreto, la UCLM, desde 2014 hasta el pasado curso, ha recibido a 8.500 alumnos dentro del programa Erasmus, un total de 2.630, el 31%, en el campus de Ciudad Real y en la sede de Almadén. Por el contrario, los estudiantes de la institución académica regional que se han marchado a otras universidades fuera de España con estancias largas han sido 5.500 en la última década, de los que 1.200 estaban matriculados en las facultades de Ciudad Real y Almadén.
Italia, Francia, Alemania, Portugal y Polonia son los destinos más comunes y también las nacionalidades de la mayoría de los estudiantes que llegan a la Universidad de Castilla-La Mancha con becas Erasmus, especialmente a las facultades de Letras, Derecho y Ciencias Sociales y Ciencias y Tecnologías Químicas. Los alumnos de estos grados son también los que más salen al exterior junto con los de Educación y los de la Escuela de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos.
Los primeros Erasmus, los que se desplazan para realizar el curso completo o el primer cuatrimestre, ya están en sus países de destino. El vicerrector de Internacionalización recuerda que el plazo de solicitudes permanecerá abierto desde mediados de octubre hasta finales de noviembre. El pasado curso, el campus de Ciudad Real y la sede de Almadén recibieron a 238 estudiantes extranjeros, mientras que 121 alumnos (el 1,7% de los matriculados en un grado o máster) salieron fuera de nuestras fronteras a estudiar a alguno de los 832 centros y facultades del mundo con los que la UCLM tiene suscrito un convenio.
Erasmus tiene como requisito, al igual que otros programas de movilidad, el idioma. Aunque depende del convenio con la universidad de destino, por regla general se exige que el alumno beneficiario tenga como mínimo el B1 de inglés. La Universidad regional, explica Raúl Martín, ofrece a los estudiantes una prueba de acreditación gratuita, mientras que el Centro de Lenguas cuenta con una amplia oferta formativa de cursos, tanto presenciales como online. El periodo de inscripción finalizó este pasado domingo, 29 de septiembre.