El Balonmano Caserío despedirá a lo grande una temporada histórica para la entidad, con su debut en la fase final de la Copa del Rey que se celebra en el pabellón Olivo Arena de Jaén. Por primera vez en la historia del torneo con este formato un equipo de la División de Honor Plata ha logrado su clasificación por méritos deportivos para la fase final y el Balonmano Caserío quiere disfrutar del momento. Atrás queda ya el sabor amargo de una cruel eliminación en las semifinales de la fase de ascenso a la Liga Asobal, una experiencia que debe servir para crecer y curtir al grupo que comanda Santi Urdiales. Ahora llega la Copa del Rey, el broche de oro, un torneo que deben afrontar sin ninguna presión y con toda la ilusión de disfrutar junto a varios de los mejores equipos del balonmano español.
El sorteo quiso emparejar a los manchegos con el Bidasoa, segundo clasificado de la Liga Asobal, en un cruce que se disputará a las 15.45 horas (Arbitraje de Florenza Virgili y Ausas Busquets). El ganador de esta eliminatoria se cruzará con el vencedor del Barça-Cangas (18.15 horas). Por el otro lado del cuadro competirán Cuenca-Torrelavega (13 horas) y Logroño La Rioja-Granollers (20.30 horas).
Pedro Martínez y Víctor Morales serán bajas en el equipo amarillo, pues no se les arriesgará. La idea de Santi Urdiales es conceder minutos a todos sus jugadores, para que "todo el mundo disfrute. Es lo más justo, que acabemos como equipo una gran temporada que hemos hecho como equipo", argumentó. Además, el técnico cántabro tuvo palabras de agradecimiento hacia Palacios, por su implicación en el equipo a pesar de la delicada situación personal que está viviendo.
La plantilla del Caserío, antes de viajar a Jaén. - Foto: LT"Nos hemos ganado participar en esta fase final, un evento muy bonito, con otros siete grandes equipos. Vamos con esa inocencia de participar por primera vez y con los ojos muy abiertos para vivir y disfrutar de esa experiencia", señaló el entrenador del Caserío, que promete "intentar competir a un equipo como Bidasoa, con unas armas muy superiores a las nuestras. Será difícil que podamos disfrutar, pero este equipo ha demostrado que siempre se vacía y eso es lo que hay que hacer".
Además Urdiales agradeció las palabras del técnico del Bidasoa, Jacobo Cuétara, que exigió a sus jugadores el máximo respeto hacia el Caserío. "Fue mi entrenador y le tengo un gran respeto", respondió Urdiales, que por otro lado cree que Bidasoa no querrá acabar la temporada habiendo perdido con un equipo de Plata. Por todo ello, reitera que su objetivo es "hacer un buen partido, como llevamos haciendo toda la temporada. Nadie daba un duro por nosotros en muchas fases de la temporada y este partido nos debe servir para brindar un buen partido ante nuestros aficionados".
Precisamente, el respaldo de la masa social y el crecimiento de las categorías inferiores son, a juicio de Santi Urdiales, los pilares sobre los que debe sustentarse el crecimiento de la entidad. "En lo deportivo ha sido un año que no esperábamos, pero de lo que debemos sentirnos orgullosos es de esa base que es necesaria para perdurar en el futuro. Tengo el convencimiento de que no es una afición de partidos ganados, sino que está identificada con el equipo y que se va a mantener o que incluso crecerá. Estará con nosotros aunque los resultados no sean tan buenos como los de este año. El equipo ha conseguido esa conexión con el público por la forma como hemos competido, con humildad, dándolo todo y siendo buena gente. Ahora queremos hacer un buen partido para que esa afición reciba un reglao en esta Copa del Rey", concluyó.