La alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora, ha comparecido esta mañana para informar en relación a las actuaciones y los daños que provocaron ayer las tormentas, tanto la que se registró a las seis de la tarde con una gran virulencia y dimensiones del granizo, como la que tuvo lugar a las once de la noche, que causó inundaciones en algunas zonas.
De este modo, Zamora no ha descartado la posibilidad de solicitar la declaración de zona catastrófica en la capital, tal y como ha solicitado la Federación Empresarial de Ciudad Real (Fecir). "Nosotros no nos cerramos a ninguna posibilidad, pero tienen que entender que en el día de hoy estamos realizando valoración de daños", ha indicado la mandataria municipal preguntada por esta cuestión e incidiendo en la necesidad de hacer un recuento de los daños, si bien insistió en que "este equipo de Gobierno no cierra ninguna puerta ni ninguna posibilidad de pedir colaboración a otras administraciones". De hecho, ha indicado que ha hablado con el presidente de Fecir y que así se lo ha trasladado.
Del mismo modo, ha comentado que también ha estado en conversaciones con el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, la subdelegada del Gobierno, con la delegada de la Junta, el presidente de la Diputación o el consejero de Agricultura para coordinar las actuaciones a poner en marcha tras la valoración de los destrozos y abordar también los daños registrados en La Poblachuela a consecuencia de las tormentas.
“Necesitamos tener datos concretos de los daños, porque un expediente de zona catastrófica tiene que tener esa valoración, qué infraestructuras se han visto afectadas, qué edificios se han visto afectados, por lo tanto, se ha hablado, y no cerramos ninguna puerta a petición de ayudas”, agregó.
La alcaldesa se ha referido a los numerosos daños materiales que se han producido en la ciudad y explicó que la tormenta de granizo que arrancó a las seis de la tarde descargó 7,6 litros por metro cuadrado en total durante todo el momento en el que se desarrolló la granizada y que en breves minutos dejó multitud de vehículos afectados, claraboyas, cristales o mobiliario de jardín y de patio afectado, así como una gran cantidad de hojas caídas por los árboles en toda la ciudad.
A las 22.40 horas se registró otra nueva granizada que descargó 15 litros por metro cuadrado y que provocó "algunas inundaciones" por los imbornales que estaban atascados por las hojas, como en la zona de la puerta de Toledo.
"Inmediatamente se activaron todos los servicios, Policía Local, Protección Civil, Aquona, Mantenimiento y servicio de Limpieza", ha detallado la alcaldesa subrayando la labor realizada por todos ellos.
En concreto, detalló que Aquona movilizó dos brigadas más otra tercera que acompañaba al camión de saneamiento.
Asimismo, la alcaldesa ha informado que con motivo de la primera tormenta los efectivos tuvieron que actuar en la ronda del Parque, avenida Tablas de Daimiel, en las calles Melilla, Barcelona, Alonso Estrada, en la carretera de Puertollano, en la zona del Hotel Parque Real, y también en las calles Romero y Tomillo. Después de la segunda tormenta intervino además en varias zonas en las que ya se actuó en la primera tormenta, añadiendo zonas nuevas como fue el Barrio de los Ángeles, debido a las hojas caídas previamente. Las zonas más afectadas en la segunda tormenta, la que tuvo lugar cerca de las once de la noche, fue la ronda del Parque, la rotonda de la Puerta de Toledo, la zona de la Universidad y la carretera de Porzuna, así como en la rotonda de acceso al Hospital General, en la rotonda del Quijote Azteca, la Glorieta Carlos III y las calles Clavel y Esperanza, Olivo y el Barrio de los Ángeles.
Del mismo modo, el Ayuntamiento informaba a las 18:30 horas Emergencias 112 Castilla-La Mancha activaba a Protección Civil Ciudad Real que con 15 voluntarios y 3 vehículos de intervención rápida dotados de material necesario, pudieron solventar las incidencias transmitidas por el 112, en colaboración y coordinación con Policía Local, como balsas de agua, caídas de ramas en la calle Estrella o en la calle Luz, una incidencia por caída de tejas en la Iglesia San Juan de Ávila o una asistencia en un domicilio por rotura de cristales de ventanas evitando de su caída en vía pública en la calle Tomillo. El servicio finalizaba a las 4 horas de mañana