El futuro de la caza en el siglo XXI pasa por lograr un mayor valoración social, de tal forma que la sociedad mayoritariamente respecte la actividad cinegética y sea consciente del papel tan fundamental que juega en la sostenibilidad medioambiental y en el desarrollo económico y social.
Así lo ha puesto de manifiesto este sábado en la tertulia que ha organizado la Fundación Artemisan en el marco de la Feria Nacional e la Caza, Pesca y Turismo (Fercatur), que se celebra en Ciudad Real durante este fin de semana, y en la que han participado distintos expertos relacionados con la caza, la empresa y la comunicación, y que ha estado moderada por el presentador de Informativos Telecinco José Ribagorda.
El director de la Fundación Artemisan, Luis Fernando Villanueva, en declaraciones a EFE ha explicado que en esta tertulia se ha puesto de manifiesto la importancia de abrir nuevas líneas de trabajo en materia de comunicación, ante el surgimiento de un movimiento animalista que ha venido a cuestionar la caza, cuando esta actividad es imprescindible para la sociedad "por muchas cosas".
"No sólo para lograr la sostenibilidad ambiental del medio natural, sino, también para evitar accidentes de tráfico o daños a la agricultura, por citar algunos ejemplos" ha detallado Villanueva.
"Tenemos por delante un importante reto, como se ha puesto de manifiesto en esta tertulia, que no es otro que ganar presencia en la redes sociales para contar en positivo lo que el sector cinegético hace por la sociedad y hacer frente y contrarrestar con un mensaje claro y certero los mensajes de odio que se lanzan contra los cazadores, a los que se demoniza cuando son unos actores imprescindibles para mantener el equilibrio de nuestros ecosistemas", ha comentado.
En este sentido, Villanueva ha reconocido que una de las conclusiones de esta tertulia ha sido "que nos podemos quejar de esa situación", pero a la vez, reconoce que se deben "unir esfuerzos, administraciones públicas, el sector y los cazadores, para poner en valor la importancia que la caza tiene y salir cada día con un mensaje positivo para que cale en nuestra sociedad".
"Internamente sabemos y somos consciente que los cazadores hacemos cosas que influyen positivamente en la gente, pero eso no es suficiente, tenemos que dar un paso adelante para lanzar esos mensajes e ideas a una sociedad que no es cazadora y que no está cercana a actividades relacionadas con el mundo rural" ha afirmado.
A su vez, ha reflexionado que en España "puede haber un millón de personas que estén en contra de la caza" y a la vez "puede haber dos o tres millones de personas de cazadores más sus familiares que pueden estar a favor", pero, igualmente, "hay más de 40 millones de personas a las que no llegamos, y es a ellas a los que debemos darles a conocer nuestro mensaje".
El director de la Fundación Artemisan ha sido claro en asegurar que para avanzar en este camino hay que invertir mucho en comunicación, algo que ya hacen desde esta fundación, basándose en la ciencia que respalda la caza como una actividad esencial.
Para Villanueva, el sector cinegético debe contar con una estrategia de comunicación, que este respalda y tenga el apoyo de las administraciones públicas, y que tenga una clara vocación educativa, tanto internamente para los propios cazadores, como de forma externa para la sociedad.
Por su parte, el periodista José Ribagorda, en declaraciones a EFE, ha reconocido que la caza tiene muchas bondades relacionadas con la actividad económica, como con el mantenimiento de los ecosistemas, por lo que es necesario hacer esfuerzos para evitar que desaparezca.
En su opinión, el futuro de la caza en el siglo XXI pasa por acercarla más a los jóvenes, formándolos y no predisponiéndoles contra la caza, sino todo lo contrario.
Para Ribargorda, también es "importantísimo" que cada vez más se conozcan las bondades de la caza, ante los mensajes negativos que se imponen a los positivos.
"Yo creo que hay que hacer ese esfuerzo por dar a conocer que la caza no solo tiene arraigo y tiene identidad, sino, que, conforma el ámbito rural, un papel importantísimo, pues no en vano el 85% del territorio de nuestro país es rural".
Y en este sentido, ha destacado que un papel importante lo han de jugar las administraciones, haciendo posible esas campañas de divulgación, pero, también, acercándola a los niños, ya que han de ser el futuro de la caza.