El Ofrecimiento a la Virgen de Peñarroya ha rozado su récord histórico de recaudación. La popular puja celebrada este domingo ha alcanzado la cifra de 39.470 euros, muy cerca de los 40.053 recogidos hace dos años y que continúa siendo el tope máximo. Un ciudadano pagó 4.000 euros por una instalación de placas solares donada por una empresa local, y otro llegó a los 1.500 euros por un rosario traído de Tierra Santa.
Es el resumen monetario de uno de los días más señalados en el calendario festivo de La Solana. El domingo del Ofrecimiento volvió a sacar a miles de personas a la calle y llenó a rebosar la Plaza Mayor y sus alrededores. Las terrazas hosteleras y los locales de ocio de la zona permanecieron repletos hasta bien entrada la noche. No en vano, la subasta se cerró al filo de las dos de la madrugada con el cuadro final de la patrona, que alcanzó un valor de 1.000 euros. Esos 39.470 euros suponen un aumento de 6.325 euros respecto al año pasado, donde el mal tiempo y un oportuno aguacero vespertino pudo diezmar la recaudación. Valga como dato que los tres últimos años han sido los más productivos de toda la serie histórica.
El carrusel de ofrendas se abrió oficialmente al filo de las 13,30 horas, donde la primera autoridad local tiene ese privilegio. La alcaldesa, Luisa Márquez, cumplimentó como manda la costumbre para dar el pistoletazo de salida. Acto seguido, la rondalla y grupo de coros y danzas del Centro de Mayores actuó frente a la imagen, ya en el pórtico de Santa Catalina. Y en seguida comenzó el concierto de pasodobles de la Banda Municipal de Música.
Así arrancó un nuevo Ofrecimiento en La Solana, que fue transitando en un ambiente de enorme participación y con bastante implicación de la ciudadanía. Los pujadores, esas figuras imprescindibles para animar la subasta, se dejaron literalmente la voz para mantener el ritmo y la motivación de los subastadores. Como es norma, la cofradía va sacando las ofrendas según el momento, dejando las más 'valiosas' para las horas de mayor afluencia.
En declaraciones a Radio Horizonte, el tesorero de la hermandad, Carmelo Simón, ha expresado su satisfacción por el buen resultado general del Ofrecimiento, no solo a nivel económico, sino también por el buen ambiente reinante durante toda la jornada. "Los solaneros siempre responden muy bien y se vuelcan con su patrona", ha dicho. Como responsable de las finanzas, admite que el dinero recogido vendrá muy bien para seguir acometiendo mejoras. "La Virgen no come, pero tiene unas necesidades y un patrimonio que debemos conservar porque pertenece a todos los solaneros".