El Balonmano Caserío cumplió la misión de ganar al Mallorca y pasar así página a las últimas dos derrotas. Lograr dos nuevos puntos era la prioridad para el equipo entrenado por Santi Urdiales y lo hizo cumpliendo el expediente, sin brillantez, con bastantes fallos incluso, pero el triunfo se quedó en casa, que al final es de lo que se trata. Y todo ello ante un Mallorca que nunca bajó los brazos y se mostró como un conjunto aguerrido, aunque su falta de efectividad en ataque fue un lastre. Con el cuadro balear regresó al Quijote Arena Rolando Urios como técnico ayudante. El hispano-cubano fue ovacionado por la grada del Quijote Arena.

Ya desde el inicio el Caserío estuvo por delante en el marcador. La primera parada de Óscar Ruiz de siete metros en la acción inicial fue ya sintomática de lo que estaba por venir. De hecho, el portero ciudadrealeño detuvo los tres primeros lanzamientos de siete metros, agudizando así los problemas en ataque de un Mallorca que apostó por un juego muy lento y largo en ataque. Atrás los baleares se mostraron como un bloque rocoso, impidiendo que los manchegos se despegasen en el marcador.

Las imprecisiones y las pérdidas marcaron este primer periodo, donde en el Caserío sobresalió Nico Barceló con 4 tantos, demostrando estar completamente recuperado de su larga lesión.

Óscar Ruiz, providencial en el partido, festeja una parada. - Foto: José Ramón García Carpintero

El Caserío siempre fue disponiendo de buenas rentas e incluso logró que el Mallorca estuviera 9 minutos sin marcar gracias a la buena labor defensiva y a las paradas de Óscar Ruiz. La máxima renta fue de los locales fue de seis goles, que se quedó en cuatro en el intermedio tras una pérdida en la última jugada, que había sido preparada previamente en un tiempo muerto.

Tras la reanudación, el partido fue a tirones, mientras Óscar Ruiz paraba su cuarto siete metros. A un parcial de 0-3 de los baleares (15-12) respondía el Caserío con otro 3-0 y luego el Mallorca obligaba a Santi Urdiales a detener el choque tras un 0-4 (18-16, m. 46). El Caserío no lograba romper el choque, a pesar de las buenas paradas de Óscar Ruiz y a los 10 últimos minutos se llegó con todo por decidir.

Los dos conjuntos se mostraban muy fallones y el primer gol de Ángel Pérez comenzó a desatascar el partido, hasta el punto de que cuando el técnico visitante solicitó tiempo muerto había recibido otro parcial de 4-0 (22-16, m. 56) que prácticamente sentenció el partido. Dos nuevos puntos que mantienen al cuadro ciudadrealeño en la zona noble de la tabla a falta del último tercio de la competición.

En la próxima jornada, el Caserío visitará la pista del Cisne, partido programado para el sábado 17 (18.30 horas).

FICHA TÉCNICA.

CASERÍO CIUDAD REAL. Óscar Ruiz, José Andrés Torres (5), Pablo Campanario (4), Juan Lumbreras, Francisco Ruiz (3), Palacios (3), Adrián Sánchez -equipo inicial- Ángel Pérez de Inestrosa (1), Martín Santano, Augusto Moreno de la Santa, Patricio Orlandi (2),Víctor Morales, Rodrigo Martín-Pozuelo (1), Nico Barceló (4), Santi Canepa.

HANDBOL MALLORCA. Pol Varela, Bedia, Sergio Torio (4, 1p.), Rubén Sánchez (3), Fernández (2), Agustín Marcos (5), Luis María de Goya (1) -equipo inicial- David Arnedo, Giménez, Matías Cañellas, Asier Satrústegui, Pere Vaquer (1), Nicolás Cecchini (2).

ÁRBITROS. Beatriz del Valle Encuentra y Patricia del Valle Encuentra. Excluyeron dos minutos a Lumbreras (2), Campanario; Giménez (2), Agustín Marcos, y al entrenador.

PARCIALES. 2-0, 4-2, 7-4, 8-4, 11-6, 12-8 (descanso); 14-10, 18-12, 18-14, 19-16, 21-16 y 23-18 (final).

INCIDENCIAS. Encuentro correspondiente a la jornada 19 en la División de Honor Plata Masculina disputado en el pabellón Quijote Arena. Buena entrada.