La Plaza de España, que en estos días de Feria se muestra muy animada, ha sido hoy escenario del XVIII Mercado Tradicional, una cita obligada en la Semana Grande de Tomelloso en la que están muy presentes las costumbres locales de antaño. Más de cincuenta puestos de alimentación, productos de la huerta, pan, productos típicos, decoración y artesanía, bordados, cuero, jabones artesanos o encajes, entre otros, dan vida a este peculiar Mercado en el que no podía faltar la presencia de las mulas, animal ligado en Tomelloso  a las faenas del campo, a la agricultura, origen de la economía local. Se trata, ha dicho el alcalde, de "evocar las tradiciones porque una sociedad no puede evolucionar si no recuerda de dónde viene" y cómo vivían sus antepasados"

Cada año participan puestos de la localidad y otras cercanas, pero también de otros puntos de la geografía nacional, este año, de Extremadura, Alicante o Madrid, según ha apuntado Alejandro Serna, presidente de Tomillar Tradiciones, asociación que organiza el Mercado con el Ayuntamiento desde el año 2003 en el que se celebró la primera edición. Algunos de esos puestos repiten año tras año, como el que monta la Peña "Los Canuthi",  donde se pueden comprar los tradicionales panes de cruz que le suministra una conocida panadería de la localidad. Es uno de los puestos que más llama la atención de los visitantes, por el sentido del humor que demuestran los Canuthis.

También han instalado sus puestos algunas asociaciones de la localidad. La nota musical la ha puesto la Charanga Los Primos.

El XVIII Mercado Tradicional llena de vida la Plaza de España

Tomillar Tradiciones, ha dicho su presidente, tiene "la salud, la ilusión y la alegría para cada año renovarnos y seguir organizando este Mercado Tradicional" para que las nuevas generaciones "conozcan lo que fue el día del ayer, un paso hacia la cultura y la historia de nuestro pueblo".

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El alcalde, que ha agradecido el trabajo de la asociación y de su presidente, ha tenido palabras también de agradecimiento para esos puestos, alrededor de una docena, que cada año repiten y ha animado a vecinos y visitantes a disfrutar de este mercado y a comprar en sus puestos.