¿Cómo está de nervios a solo unas horas de que comience todo? ¿Más tranquila que el año pasado, que fue su primera vez?
Es una sensación muy diferente, porque el año pasado todo era una sorpresa, porque todo era como la primera vez. Ahora ya no será la primera vez en determinadas cosas, pero nos ha dado el tiempo suficiente de hacer tantos proyectos nuevos y generar tantas colaboraciones nuevas que va a haber muchas primeras veces de otras cosas.
Por ejemplo, vamos a estrenar el proyecto 'Plataforma Corral', que es para los jóvenes directores en el Corral de Comedias; es una primera vez y estamos nerviosas e ilusionadas. Vamos a hacer una maravilla, que ha sido un programa de mediación cultural con las mujeres encajeras, que lo vamos a presentar el domingo en la plaza Mayor, y eso nos tiene con mucha ilusión y emoción por ver a esas mujeres mayores del pueblo que se sienten parte del festival. Y vamos a hacer 'Acaricia un verso' con las personas ciegas de la ONCE, participando personas ciegas y no ciegas, equilibrando todas las sensaciones y emociones.
Con respecto al año pasado estoy más tranquila, pero con muchas otras ilusiones, porque llegamos a este segundo año con muchos proyectos nuevos.
¿Cuál ha sido la respuesta de los patronos del festival y del apoyo privado este año?
Eso es algo que me gustaría destacar. Del año pasado a este se ha incrementado la colaboración de todo el mundo, es apasionante. Hemos vivido una colaboración arrolladora de las instituciones, de asociaciones, del tejido profesional, incluso tenemos un nuevo patrocinador importantísimo, que es Iberdrola, y Globalcaja mantiene su apoyo.
No solo no hay nadie que se haya descolgado del carro, sino que todo lo contrario, se ha sumado muchísima gente, como la Universidad de Castilla-La Mancha, con la que tenemos como cinco proyectos en activo. Vamos a hacer conjuntamente algo que es importantísimo para un festival como el estudio del impacto económico, social y cultural. Hemos creado un centro de recursos online del Siglo de Oro, para que cualquier persona en el mundo que esté interesada entre en la página web del festival y lo haga. Hacemos las Jornadas de Teatro Clásico y hacemos las Jornadas de Teatro y Educación. Ycon la Diputación está pasando lo mismo, es decir, estamos consiguiendo con todas las instituciones y todos los colaboradores que todo el mundo se siente parte del festival.
¿Esto es mérito de Irene Pardo?
No, eso es mérito de lo que se va diciendo del festival, del equipo del festival y de tener un sentido muy colaborativo del trabajo y entender que el festival es de todos y de todas.
¿Cuánto de su directora tiene ya el Festival de Almagro?
El año pasado ya era un festival muy cercano a mis propósitos, que tiene que ver con crear una comunidad cultural en torno al Siglo de Oro. Hay unas emociones que provoca Almagro, que provoca el Festival de Almagro, que tienen que ver con el sentimiento de pertenencia y con el sentimiento de arraigo.
Siempre cuento como curiosidad algo que me encanta: nadie nombra la palabra 'festival', solo los periodistas. En Almagro nadie dice festival, todo el mundo dice 'el teatro', 'empieza el teatro', 'vienen los del teatro', 'se acaba el teatro'... Y en Madrid y fuera nadie dice 'el festival', siempre dicen 'Almagro'. Hay como una comunidad en el fondo. A mí me volvería loca crear la Compañía del Festival de Almagro. Tenemos técnicos, tenemos artistas, tenemos todo lo que necesita una compañía, y lo más importante es crear espíritu de compañía.
¿O sea, que este festival no sería exportable a ningún otro lugar de España que no fuera Almagro?
No, ni del mundo. El Festival de Almagro es lo que es porque se hace aquí. Porque genera un círculo concéntrico. Es un festival con un arraigo en el territorio enorme, que bebe de la cultura de la tierra que habita, pero que irradia al mundo entero. También porque es lo trascendental que tienen los clásicos, que tratan temas que son intrínsecos al ser humano: el amor, el honor, la dignidad del hombre, la solidaridad, la lucha contra el poder... Eso trasciende épocas, trasciende fronteras, trasciende zonas geográficas. Es entendible en Japón como lo es en Uruguay, como lo es en Inglaterra, y por eso es universal. Pero si a eso le sumas el hecho de que tiene lugar en una de las ciudades con un patrimonio artístico más bello de España, con el corral de comedias mejor conservado del mundo, pues es ¡match!
Aun siendo de Almería, se la ve enamorada de Almagro. Dígame su rincón o su momento preferido.
Me encanta, a las nueve de la noche, salir por la puerta de Valdeparaíso y atravesar la plaza de las Bernardas, con Torremejía a la derecha, con la iglesia de las Bernardas a la izquierda y con un cielo que a veces es celeste, como mi mar Mediterráneo, y otras veces es fuego. Tiene que ser en el anochecer, claro, a la hora que salgo de aquí camino de los teatros.
Le he leído que en esta edición del festival tiene que darse un salto cualitativo. ¿A qué se refiere?
Es el momento de buscar un impulso, para que dé un salto cualitativo, por todas las novedades que antes he comentado. Además, en otoño-invierno tenemos previsto iniciar un programa de residencias artísticas en Almagro. Todo el patronato está a favor y su compromiso es poner los recursos necesarios para que eso suceda. Y también vamos a hacer, con Acción Cultural Española, un desembarco de muchos de los proyectos que tenemos, seguramente en Uruguay, y hemos hablado también con un teatro en Argentina, para tratar de generar otras producciones o llevar algunas de las actividades que hacemos aquí. La idea también es replicar lo que sucede en el festival fuera del festival.
Hábleme de ese programa de residencias artísticas en Almagro.
Los procesos creativos de las compañías muchas veces tienen una etapa final que es muy complicada. Antes se encuentran espacios de ensayo más fácilmente, pero la implantación del estreno de una obra de teatro en un espacio escénico de verdad, en un teatro, en esos 10 últimos días de ensayo o dos últimas semanas, hace que una obra salga mucho mejor y tenga mejor resultados, si ese proceso se puede hacer en las mejores condiciones. La idea es que esa última fase del proceso se pudiera hacer aquí en Almagro. La compañía en cuestión podría residir en Almagro, pasar esos últimos 10 días aquí, trabajando aquí, con espacios disponibles para ensayar y con un teatro a disposición para poder hacer el estreno. El proyecto ya se lo transmití también al presidente de la Junta de Comunidades y estaba de acuerdo.
La semana pasada ya se vendió la mitad del aforo de los teatros. ¿Están contentos con la respuesta del público?
Sí, yo estoy muy contenta. Evidentemente, un festival requiere de los recursos económicos y la aportación de la venta de entradas, que es muy importante. Pero claro, que venga mucha gente, lo que supone no es ni más ni menos que asistan los ciudadanos y las ciudadanas a los espectáculos, a las actividades, a las presentaciones.
Luego hay algo que a mí me gusta mucho decir, que es que la idea de la programación se basa en que tú puedas hacer tu propia programación. De repente tú te conviertes en programador de tu propia experiencia porque tú cogerás el festival de festivales que te proponemos:podrás ir a ver una obra de teatro de corte muy clásico, como un Calderón de los pies a la cabeza; o si tienes ganas de investigar puedes ir a ver una performance de un artista como Miguel López; o si te gusta más la música, puedes ir a ver a una de las dos orquestas, o la Sinfónica o la Filarmónica; o puedes ir al museo a ver la exposición de 400 años de todas las escenografías de Calderón; y luego te vas a ver las rutas arquitectónicas 'las piedras hablan'... Puedes dibujar tu festival, el que tú creas que te gusta, incluso el que no sabes que te gusta, que me parece todavía más interesante.
¿Qué representación es el plato fuerte de esta edición?
Hay muchos primeros platos este año y vamos a cerrar con un postre maravilloso.
Y para empezar, nada menos que entregar el premio Corral de Comedias a Rafael Álvarez 'El Brujo'.
Este festival no me da nada más que regalazos. Llamar a Blanca Portillo el año pasado, y este año llamar a 'El Brujo' fue muy emocionante, y él estaba muy emocionado cuando le dijimos que el patronato le otorgaba el premio. Van a venir sus amigos y creo que va a ser muy bonito.
Por último, ¿qué le diría a ese ciudadrealeño que aún no se ha decidido a pasarse por Almagro?
Les diría que no se pierda su festival, porque es su festival. Y no es por cercanía, es que es suyo.