Un reciente estudio publicado en la revista Ecology and Evolution, revela que el gorrión común (Passer domesticus) juega un papel importante en la dispersión de semillas de diversas plantas, afectando a especies como la higuera (Ficus carica) y otras plantas arvenses como geranio (Geranium sp.) o la acedera (Rumex sp.), lo que podría suponer un impacto significativo en la forma en que percibimos a esta pequeña ave y su función en los ecosistemas.
El estudio, liderado el Grupo de Investigación en Ecología y Gestión de Fauna silvestre del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC– CSIC, UCLM, JCCM), en colaboración con investigadores de la Universidad de Debrecen (Hungría), del Departamento de Ciencias Ambientales de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN–CSIC), muestra el papel dual del gorrión común como depredador de semillas, pero, a su vez, como eficaz dispersor de las mismas.
Según han recordado este lunes los autores del estudio en nota de prensa, el gorrión común es conocido por su increíble capacidad para adaptarse y prosperar en casi cualquier entorno, desde ciudades bulliciosas hasta campos tranquilos.
Ya sea en el campo o en la ciudad, su dieta generalista y oportunista está compuesta de forma importante por alimentos de origen vegetal entre los que destacan las semillas, por lo que tradicionalmente se le ha etiquetado como un depredador de semillas, sin embargo, ahora este estudio también revela que puede ser un eficaz dispersor de semillas.
Al ingerir y defecar semillas, los gorriones pueden ayudar a propagar tanto plantas beneficiosas como especies invasoras, influyendo en las comunidades vegetales locales de maneras que apenas hemos comenzado a comprender, han señalado los investigadores.
Su habilidad para dispersar semillas podría convertir a los gorriones comunes en auténticos aliados en la conservación de la biodiversidad y el mantenimiento de ecosistemas saludables.
Además, otros pájaros granívoros, igualmente percibidos tradicionalmente como meros depredadores de semillas, podrían tener funciones similares en la dispersión de semillas, lo que subraya la importancia de reevaluar su papel en la naturaleza.
Los investigadores subrayan que "este estudio desafía nuestras suposiciones sobre el gorrión común y otras aves granívoras, mostrándonos que tienen el potencial de ser colaboradores valiosos en la dispersión de semillas. Si tenemos en cuenta su enorme población y su adaptabilidad, los gorriones podrían estar influyendo en la biodiversidad y en los servicios ecosistémicos de nuestros entornos agrícolas y urbanos más de lo que pensamos".