La Diócesis de Ciudad Real cerró el pasado ejercicio 2013 con un nuevo descenso en el número de matrimonios celebrados, lo que supone la quinta caída consecutiva desde 2008 y la rebaja en más de un millar del número de bodas religiosas durante el último lustro, según indican los datos del Obispado a los que ha tenido acceso este diario.

En concreto, la información del Obispado revela que 2013 terminó con un total de 849 matrimonios religiosos frente a los 1.885 que se contabilizaron cinco años antes; mientras, en 2009 la cifra ya cayó hasta los 1.579 pasando a 1.323 durante 2010, a 1.199 en 2011 y a 1.015 en 2012. En definitiva, una contracción del 122 por ciento en sólo cinco años. En este sentido, el delegado de Medios de Comunicación de la Diócesis, Miguel Ángel Jiménez, aseguró a La Tribuna que hay dos claves para entender el descenso: «la situación económica y los casos de personas que vienen de matrimonios anteriores y que no tienen la nulidad matrimonial».

Asimismo, Jiménez sostuvo que el dinero se sitúa como una de las causas que llevan a muchas parejas a no casarse, si bien subrayó que «para una boda solamente es necesario contar con los novios y sus padres, si bien la gente tiene muy en cuenta lo social». Además, avanzó que también hay muchas parejas que han optado por vivir juntas antes de casarse; por ello, desde el Obispado no se mostró ningún tipo de preocupación por los datos y se indicó que «lo que nos preocupa es que la gente dé sentido a su vida y Dios lo hace. Si los datos supusiesen una lejanía de Dios nos preocuparía, pero eso no existe porque, por ejemplo, el último CIS indica que la gente se declara más creyente porque recibe las respuesta que espera de la Iglesia. Además, las manifestaciones religiosas en esta provincia son palpables y muestran un gran apoyo, algo a lo que hay que sumar el peso en la X de la Iglesia en esta provincia».

En otro orden de asuntos, las cifras del Obispado indican que las confirmaciones han repuntado en los últimos años pasando de 1.871 en 2008 a 2.080 a lo largo del año pasado. Mientras, las primeras comuniones también se incrementaron durante el último año pasando de 3.360 a 3.691 (en 2008 fueron 4.550) y los bautizos se redujeron pasando de 3.833 a 3.571; hace cinco años fueron 4.742.

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