El futuro de la factoría que la compañía española Solaria Energía y Medio Ambiente posee en el parque empresarial La Nava II de Puertollano sigue sin despejarse y las últimas noticias que la dirección le ha trasladado al comité de empresa no son muy halagüeñas. En la reunión mantenida ayer, los responsables de la empresa señalaron que los pedidos que se estaban negociando con varias firmas europeas «se han caído» y, por tanto, el único cliente que sigue interesado en hacer algún encargo es la multinacional Hengdian Group DMEGC Magnetics Company Ltd., de la República Popular de China, que el pasado verano firmó un contrato de venta de módulos fotovoltaicos con Solaria para que ésta le suministrara 100 megavatios de módulos bajo un contrato de un año de duración, prorrogable a dos. Sin embargo, este contrato aún no se ha materializado.
Solaria y Hengdian Group DMEGC mantienen las negociaciones, y representantes de la firma asiática llevan varias semanas en Puertollano para comprobar in situ la calidad del producto que se elabora en esta factoría. No en vano, estos días se están fabricando varios centenares de paneles fotovoltaicos con este objetivo, para lo cual la semana pasada trabajaron unos 130 empleados y en ésta han sido en torno a 60. Sin embargo, desde la dirección de Solaria explican al comité de empresa que los criterios que exige la compañía asiática son «muy estrictos» y, además, se mantienen las desavenencias para negociar los costes de producción.
Asimismo, un grupo de trabajadores de Solaria Energía y Medio Ambiente ha viajado hasta China para buscar nuevos proveedores debido al cierre de varias empresas que hasta ahora suministraban a la factoría situada en el parque empresarial La Nava II de la ciudad industrial.
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