La carne de caza brilló ayer con luz propia en Almagro. Lo hizo bajo el escenario del primer Congreso Internacional de Gastronomía Cingética, celebrado en el Palacio de Valdeparaíso, y de la mano de 24 chefs, de los que doce cuentan al menos con una estrella Michelin. Un evento que hasta hoy, 20 de noviembre, reúne a expertos, representantes del sector cinegético y cocineros llegados de diferentes partes del mundo, como el austriaco Sebastian Frank, el belga Willem Hiele o el italiano Matteo Vergine, entre otros.
Un congreso internacional que abrió ayer sus puertas por primera vez con el fin de posicionar la carne de caza a nivel mundial con Almagro como escaparate inigualable y con un elenco de lujo de cocineros expertos en gastronomía cinegética. «Estoy muy contento de que exista un lugar en el que se dé un enfoque a la alta cocina y a la carne de caza, la más natural que jamás puedas comer», manifestó el chef Sebastian Frank a La Tribuna minutos antes de su demostración de cocina. «La gente no sabe mucho sobre la carne de caza, pues el interés por la de vaca, pollo o cerdo es mucho mayor que por la cinegética, por lo que cada vez es más necesario impulsar este tipo de espacios», argumenta el chef, que luce en su chaquetilla dos estrellas Michelin, la primera lograda en 2011 y la segunda en 2015 gracias a la perfección y el sabor de su cocina, «basada en verduras con un acercamiento a la carne de caza», la única que se degusta en su restaurante Horváth (Berlín).
Este congreso internacional nace a propuesta de la Diputación de Ciudad Real y en colaboración con Asiccaza. El presidente de la Institución provincial, Miguel Ángel Valverde, lamentó ayer, durante la inauguración, que el 95 por ciento de la carne de caza producida en España se exporta al extranjero, por lo que reconoció que algo se está haciendo mal si no se disfruta en su zona de producción. Por ello, se mostró seguro de que esta cita gastronómica, en la que se comparten sus conocimientos y propuestas culinarias, marcará «un antes y un después» en la consideración de la carne de caza como motor de desarrollo económica. «La caza ha configurado nuestros paisajes, nuestra naturaleza e incluso nuestras relaciones sociales. Ahora, más que nunca, debemos convertir esta tradición en un elemento vertebrador e impulsor de nuestro territorio», enfatizó.
La carne de caza 'brilla' en Almagro El Centro Internacional de Gastronomía Cinegética es una «ventana al mundo», ya que además de cocineros, también están presenten profesionales de la restauración que disfrutan de ponencias y de la degustación de propuestas culinarias elaboradas en las demostraciones de cocina. Sin olvidar además el marketplace (compra y venta de artículos) en los patios principales, donde marcas del sector presentan sus productos y novedades.
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