En el marco de la transición energética que enfrenta España, la provincia de Ciudad Real emerge como un ejemplo de los avances y desafíos en la expansión de la infraestructura de recarga para vehículos eléctricos. Con un total de 110 puntos de recarga de acceso público, según datos de Electromaps, Ciudad Real se posiciona en el camino hacia la electrificación del transporte, aunque aún existen retos para alcanzar los objetivos de descarbonización propuestos por el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC).
El Barómetro de la Electromovilidad, publicado por la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), muestra un crecimiento en la infraestructura de recarga a nivel nacional del 6,1% en el último trimestre, alcanzando un total de 37.876 puntos de carga en toda España. Esta expansión, sin embargo, todavía está lejos de los 63.500 puntos que se requieren para cerrar el año conforme a las metas del PNIEC y del programa «Fit for 55» de la Unión Europea, diseñado para reducir las emisiones de carbono en un 55% para 2030.
En Castilla-La Mancha, la situación es similar a la media nacional. La región ha registrado un crecimiento sostenido en la instalación de infraestructura de recarga, superando ligeramente la media nacional con un índice de 15,3 puntos sobre 100 en el indicador de electromovilidad, un parámetro que mide tanto la penetración de vehículos eléctricos como la disponibilidad de estaciones de recarga. Navarra, Cataluña y Castilla y León también superan esta media, destacándose como líderes en la implementación de infraestructura de recarga. Actualmente, la región cuenta con más de 1.400 puntos de recarga.
Punto de recarga en el Eleclerc - Foto: Tomás Fernández de MoyaEn Ciudad Real, el crecimiento de puntos de recarga ha sido notable. La base de datos de Electromaps indica que 41 puntos de recarga se añadieron en los últimos 12 meses, de los cuales 20 se instalaron en los últimos seis meses. Esto evidencia una aceleración en la instalación de estos puntos en la provincia. El último de ellos, ubicado en la estación de servicio Plenoil Ciudad Real I, se añadió en julio de 2024.
La mayoría de los cargadores disponibles en la provincia son de tipo CCS2, un estándar europeo ampliamente utilizado por la mayoría de los vehículos eléctricos. Este tipo de cargadores permite una recarga rápida, aspecto crucial para usuarios que necesitan reducir el tiempo de espera en las estaciones de carga. Sin embargo, como en el resto del país, aún existen barreras que limitan la funcionalidad de toda la infraestructura instalada.
A nivel nacional, aproximadamente el 21% de los puntos de recarga de acceso público instalados no están operativos debido a factores que incluyen problemas administrativos y técnicos. Si estos puntos inactivos estuvieran en funcionamiento, la red total de recarga en España alcanzaría los 48.209 puntos, acercándose más a los objetivos de 2024.
Castilla-La Mancha se encuentra en una posición favorable para aprovechar el auge de la movilidad eléctrica. Con un total de 4.985 puntos de recarga distribuidos por la comunidad, la región ha mostrado un compromiso con la electrificación del transporte que la sitúa entre las que registran un crecimiento notable en este ámbito. La instalación de puntos de recarga no solo favorece la reducción de emisiones, sino que también responde a la creciente demanda de los usuarios de vehículos eléctricos, quienes necesitan mayor disponibilidad de puntos de carga en sus desplazamientos diarios.
El Barómetro de la Electromovilidad destaca que Castilla-La Mancha, junto con otras regiones como Aragón y Cantabria, ha experimentado un incremento significativo en el último trimestre, una señal de que la región sigue adaptándose a los requisitos de sostenibilidad. En este contexto, Ciudad Real contribuye al avance general de la comunidad autónoma, reflejando el esfuerzo de las autoridades, así como de las empresas en la instalación de infraestructuras.
La mejora de la interoperabilidad entre estaciones de carga es clave para facilitar la experiencia de recarga en España, donde múltiples redes de recarga dificultan la búsqueda de estaciones y el pago sencillo. Una unificación de sistemas favorecería la adopción de vehículos eléctricos.
Además, en zonas rurales y provincias como Ciudad Real, la instalación de cargadores rápidos podría impulsar el uso de estos vehículos en desplazamientos interurbanos, reduciendo la dependencia de estaciones de servicio convencionales. Ciudad Real refleja el avance hacia un transporte más sostenible en España, con una red de recarga en crecimiento que contribuye a los objetivos nacionales e internacionales de reducción de emisiones.
La capital, a la vanguardia
Ciudad Real Capital contará con 18 nuevos puntos de recarga para vehículos eléctricos, distribuidos en 500 metros cuadrados de espacio público. La empresa EDP gestionará esta infraestructura tras obtener la adjudicación de la Junta de Gobierno Local.
La concesión abarca la instalación, mantenimiento y suministro de estos puntos de carga durante los próximos 10 años. Los puntos de recarga se situarán en diversas ubicaciones estratégicas de la ciudad: un punto en la parada de taxis de la plaza del Pilar; dos en el aparcamiento del Museo del Quijote; dos en el aparcamiento de Julio Melgar; tres en el parking de la estación de AVE; uno en la plaza Infante de la Cerda; otro en el aparcamiento de la plaza del Trillo; y puntos adicionales en la calle Mata, aparcamientos de Severo Ochoa, Echegaray y Carlos López Bustos, así como en las calles Toledo, Calatrava y en la Puerta de Santa María.
Por su parte, la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) instalará ocho puntos de recarga para vehículos eléctricos en sus centros de trabajo en la provincia como parte de un proyecto financiado con fondos europeos Next Generation. Con un enfoque en la sostenibilidad y la reducción de emisiones, cinco de estos puntos serán de carga semirrápida (22 kW) y tres de carga rápida (50 kW), facilitando el uso de vehículos eléctricos para los desplazamientos laborales de su personal.
Esta iniciativa se enmarca en el compromiso de la CHG de impulsar una movilidad más ecológica en sus instalaciones y de asegurar que los puntos de recarga estén disponibles en distancias de menos de 50 kilómetros desde cualquier centro en la provincia.