Los casi 393.000 electores llamandos hoy a las urnas podrán votar de forma presencial en la mesa electoral que les corresponda según el censo electoral o votar por correo tanto si residen en España como si están en el extranjero, un derecho que en estas elecciones solicitaron 5.579 personas, menos de la que pidieron votar por correo el verano pasado, en las elecciones generales, solo en la capital, donde más de 6.200 personas ejercieron su derecho a través de las oficinas de Correos.
Ese dato avanza una de las principales características que suele acompañar a las elecciones europeas en Ciudad Real, el de la absención. En España, el voto no es obligatorio y tanto el voto como la abstención son derechos electorales. Y los ciudadrealeños lo ejercen más cuando toca elegir eurodiputados. Los ciudadrealeños, desde la llegada de la democracia, desde la convocatoria del referéndum para aprobar la Ley para la Reforma Política, que enterró las estructuras de la dictadura franquista en 1977, han tenido delante 57 urnas para elegir entre elecciones municipales, autonómicas, al Congreso, para el Senado, las europeas y referéndums. Cuatro de esas cinco citas electorales que arrastraron una mayor abstención fueron las elecciones europeas de los años 2014, 2004, 2009 y la de 1989. En las tres primeras, con más de la mitad de los ciudadrealeños con derecho a votar quedándose en su casa. El otro proceso electoral que menos interés despertó, con una abstención récord del 55% en la provincia, también estuvo vinculado con Europa: fue el referéndum de 2005 convocado para aprobar o no -ganó el sí- la Constitución Europea.
Las últimas elecciones de 2019, que se celebraron de manera conjunta con las municipales y autonómicas, dejaron una abstención del 32,27 por ciento. La última vez que se celebraron en solitario, como este domingo, fue en 2015: la abstención fue entonces del 53,7%.