El oficio de Miguel Ángel Alba no tiene nada que ver con la agricultura, pero desde marzo dedica parte de sus tardes a cavar la tierra, quitar malas hierbas, instalar el riego por goteo y recoger su cosecha de hortalizas. Lo hace a tres minutos de su casa, sin salir de la ciudad. Él es uno de los beneficiarios de los huertos urbanos que puso en marcha el Ayuntamiento en la calle Sol y reconoce que, además de abastecerse de productos de temporada, «es como una auténtica terapia, desestresante completamente».   

Este ciudadrealeño es profesor de Geografía e Historia de un instituto de Malagón, aunque residente en el barrio de Camino de la Guija, bajo cuyo paraguas solicitó adherirse a esta iniciativa. En total, son cuatro miembros de esta asociación vecinal los que se reparten los 100 metros cuadrados de la parcela, 25 por cabeza. Allí ya plantó cultivos de la temporada de verano, como tomates, pimientos o berenjenas y le fue «bastante bien». No sólo tuvo para llenar la despensa, sino que pudo llegar a repartir parte de su producción entre los vecinos del barrio, comenta satisfecho.

Como cultivos de invierno, ya recoge las acelgas, vigila las espinacas y tiene plantados también brócolis. «Es la primera vez que se cultiva esta tierra y es bastante fértil». Su trabajo le ha costado, ya que al principio tuvo que afanarse para preparar el terreno y aprender lo que era ser hortelano porque no había cultivado nunca nada. Se formó con el curso que se promovió desde esta iniciativa de huertos urbanos y, además, tiró de móvil con tutoriales de Youtube, asegura con una sonrisa. 

Hortelanos en plena Ciudad Real - Foto: Rueda Villaverde«Tardo tres minutos en llegar al huerto. En vez de ir a la tienda a comprar, vengo aquí a coger la verdura para la comida de estos días. Son productos recién recolectados y ecológicos», dice Alba, poniendo el acento en que en estas parcelas no se usan «ni pesticidas, ni insecticidas y ningún tipo de producto químico».  

En concreto, fue el pasado mes de marzo cuando se asignaron las parcelas de asociaciones de vecinos y de entidades sociales, por lo que ya tienen un mayor rodaje, si  bien fue el pasado 14 de septiembre cuando se sortearon los huertos entre particulares. Se tuvo que hacer por sorteo debido a la alta demanda, hasta 110 peticiones. 

Romualdo, que prefiere permanecer alejado del foco de las cámaras, es uno de esos vecinos que gestiona una de estas pequeñas parcelas a modo particular. Confiesa que es «inexperto» en el ámbito de la agricultura, pero que optó a la asignación de estas parcelas animado por su hermano y debido al parón de actividad que tiene ahora. Acude al huerto «un día sí y otro no» y está expectante para comprobar cómo irá la siembra. «En la huerta no se puede tener prisa», comenta por su parte Felipe Jiménez, otro de los beneficiarios, que, mientras planta cebolillos reconoce que le gusta esto de cultivar. 

Hortelanos en plena Ciudad Real - Foto: Rueda Villaverde«Es el culmen de varios años de lucha que llevamos, porque antes de que hubiera huerto, desde la asociación ya planteábamos la idea de desarrollar esta iniciativa», explicó el presidente de los vecinos de La Guija, Luis Mario Sobrino, en referencia a estos nuevos huertos, en los que se ha implicado la Concejalía de Participación Ciudadana y la de Parques y Jardines y que se suman a los que ya existían en El Perchel y El Pilar. En el huerto de la calle Sol, además, hay un vivero en el que una asociación recupera plantas de parques y viarios públicos que sufrien daños.