José Andrés Torres fue uno de los jugadores del Caserío más destacados en la victoria en el encuentro aplazado este martes en la pista del Fundación Agustinos de Alicante. El pivote sevillano marcó 10 goles y fue una auténtica pesadilla para la defensa alicantina. Dos puntos que permiten a los ciudadrealeños ser cuartos en la tabla a tres puntos de su próximo rival, el Burgos, que es el líder.
"El equipo llega muy bien", confiesa Torres, que explica que será "un partido muy duro, pero a la vez muy ilusionante. Sabemos de la dificultad de ganar al líder, creo que se resolverá en los minutos finales".
En este sentido, considera que el apoyo de los aficionados puede ser clave. "Dentro de la pista sentimos sus ánimos y en los últimos minutos nos pueden dar ese empuje que necesitamos". Además, no cree que sea un partido determinante para decidir la zona alta d ella tabla, pues "esta Liga es muy difícil y te puedes dejar puntos en cualquier lado".
En el plano individual, asegura que "siempre intento aportar lo máximo que puedo al equipo".
Por su parte, Julián Amores, presidente del club, asegura que «es un partido que lo tiene todo y creo que tiene mucho mérito que a estas alturas podamos estar compitiendo con el líder».
Se espera una magnífica asistencia de aficionados del club, que en los prolegómenos del encuentro realizará la fotografía oficial de las categorías inferiores. Además, el choque será tendrá un carácter solidario, pues todo lo recaudado de la rifa y el aperitivo irá dirigido a la Asociación Manchega de Hiperactividad y Déficit de Atención (Amihda).