La fiscalía de Ciudad Real solicita una pena de cárcel de 11 años y medio para O. R. H. M. al que acusa de un delito de abuso sexual continuado hacia la sobrina de su pareja, una menor de edad. Durante 11 años, el acusado mostró imágenes pornográficas a la niña y la realizó tocamientos, incluso intentando una penetración sexual. Los abusos fueron denunciados cuando el procesado amenazó a la menor con que iría a la cárcel si contaba lo sucedido tras haber sido denunciado por abusar de otra sobrina suya, también menor de edad, en este caso en Fuenlabrada.
Según la Fiscalía, el acusado albergó desde que la niña tenía seis o siete años la intención de procurarse satisfacción sexual ilícita mediante actos invasivos de la indemnidad sexual de la niña. Según el informe de la Fiscalía, el procesado visitaba con frecuencia a la familia de la menor, donde se producían reuniones familiares. El procesado mostraba imágenes pornográficas a la menor y besaba en la boca a la niña en cada visita, sin que ésta se quejara de ello. El procesado gozaba de la confianza de la familia para estar a solas con la menor, en base a la relación de parentesco que les unía, de manera que para la niña el procesado era el tío O.
La víctima ha sufrido un trastorno postraumático como consecuencia de los hechos. La Fiscalía, además, pide para el acusado la prohibición de aproximarse a la víctima y la prohibición de comunicarse con ella por cualquier medio de comunicación o medio informático o telemático, contacto escrito, verbal o visual, así como la medida de libertad vigilada por tiempo de cinco años a partir del cumplimiento de la pena privativa de libertad.