El anuncio del Gobierno de España de que este año no habrá Presupuestos Generales del Estado (PGE) tras el adelanto electoral en Cataluña supone, de partida, mantener con vida las cuentas de 2023 y, de rebote, deja en el aire más de 220 millones de euros que Moncloa tenía «proyectados» en inversiones en Ciudad Real. 

Ese dinero es el que aparece en el presupuesto de 2023 a través de las anualidades que deberían incluirse en unas cuentas de 2024 que ya no verán la luz. En total, se preveía una asignación de 223 millones. La mayor parte, para infraestructuras ferroviarias y también para actuaciones como el medio millón de euros del nuevo edificio judicial de Tomelloso y 800.000 euros para el Castillo de Montiel, entre otras.

Unas cantidades que no tienen por qué perderse una vez prorrogadas las cuentas. Fuentes consultadas por La Tribuna explican que la extensión del PGEdel año pasado deja en manos del Gobierno qué inversiones se harán con los mismos euros que había el año pasado. «Se cambia la letra, pero no la cifra». Por ejemplo, Transportes y Transición, las dos áreas que más dinero mueven, contaban con casi 14.000 millones de euros de inversión. Ese dinero es el que ahora se tendrá que decidir dónde va a parar. 

Más de 220 millones en el aire con los PGE prorrogados - Foto: EFELos empresarios de CEOE, sin embargo, lo tienen claro: «Las inversiones del Estado se van a frenar» con la prórroga del presupuesto en un año, remarcan, «en el que tenemos que hacer inversión y estamos enmarcados en el plan de recuperación y hay que planificar las inversiones» con unos presupuestos non natos. Desde Ciudad Real, la patronal Fecir apunta que el hecho de que no vaya a haber PGE «es malo, pero quizá nos puede venir hasta bien». El presidente de los empresarios provinciales, Carlos Marín, asegura que «la debilidad de la capacidad negociadora del Gobierno hubiera dejado en manos de nacionalistas catalanes y vascos las inversiones de este año y, visto lo visto, por cómo nos tratan, casi es mejor que no hayan salido los presupuestos», señala.

En ese Congreso que no votará presupuestos este año, PP y Vox se unen a las críticas a la decisión adoptada por Moncloa. El parlamentario popular ciudadrealeño Enrique Belda habla de un «fracaso absoluto» del Ejecutivo que lidera Pedro Sánchez y de «irresponsabilidad» por la renuncia a intentar sacar adelante las cuentas. «Es una tropelía más, pero como son tantas, esta parece que pasa desapercibida». En esa línea, avisa que la prórroga de las cuentas de 2023, un año  electoral, deja unas «reglas de juego desconectadas» de la realidad de 2024, con una situación de partida «que no era buena para Ciudad Real», asegura Belda. Una perspectiva que comparte el diputado provincial por Vox, Ricardo Chamorro. «El presupuesto que ahora se prorroga era un desastre para Ciudad Real, no había nada ni para la A-43, ni la N-430 ni la carretera de Toledo», recuerda. A juicio de Chamorro, el paso dado por el Gobierno de PSOE y Sumar de descartar la tramitación de unos presupuestos es fruto «de su inestabilidad y de su endeblez» en un Congreso que, dice, «se ha convertido en un mercado persa».

Distinta es la visión que ofrece la diputada por el PSOE por Ciudad Real, Cristina López Zamora. La socialista avala el paso del Gobierno, «se ha hecho todo lo posible», aunque reconoce «que no es el mejor escenario». López Zamora defiende, eso sí, «una hoja de ruta muy bien dibujada» para la provincia por parte del Gobierno de Pedro Sánchez a través de unas cuentas que han ido incrementado su partida de inversiones directas en Ciudad Real año a año. 

La diputada del PSOE restaba relevancia al hecho de que no vaya a haber presupuestos este año, «no es la primera vez que pasa y estamos en marzo y en Ciudad Real capital o en Bolaños tampoco hay», y defendía que los presupuestos prorrogados de 2023 «eran buenos para Ciudad Real, con partidas en agua, comunicación y seguridad». 

La parlamentaria reafirmaba «el compromiso» de los parlamentarios socialistas «para que este año no se deje de invertir ni un solo euro» de lo previsto por el Gobierno en Ciudad Real. Según la cifras que maneja Seopan, el lobby que reúne a las grandes constructoras del país, la administración central licitó, durante 2023, proyectos por valor de casi 90 millones de euros en Ciudad Real frente a los 15 de 2022 o los 27 de 2021. Inversiones, que, dijo López Zamora, este año dependerán del estado de la ejecución de los proyectos o de las dificultades que aparezcan en la trayectoria parlamentaria. Ponía el ejemplo del voto en contra del PP a la senda de déficit en el Senado que, asegura, se traduce en que Castilla-La Mancha perderá 50 millones de euros.