La sectorial vitivinícola de Cooperativas Agroalimentarias tiene previsto celebrar una reunión la próxima semana para abordar las previsiones iniciales de vendimia que dio en el mes de julio y que podrían haberse quedado cortas. Se trata de una sensación que no se conocerá a ciencia cierta hasta ese encuentro, más si se tiene en cuenta que las previsiones de zonas vinícolas donde la vendimia es más tardía como Castilla y León o Francia indican que habrá una caída de la producción en términos generales.
El portavoz de la sectorial, Juan Fuente, explicó a La Tribuna que la intención es «poner en orden» en ese próximo encuentro las primeras cifras con las que se trabajan y los datos de la entidad. «No tenemos datos todavía exactos de cómo está la producción» y, aunque, es «posible» que en Ciudad Real está «un pelín al alza de las previsiones, es necesario pasar de especulaciones a cifras con ese encuentro». La intención será saber «si las previsiones que se hicieron en su momento, en el mes de julio, se mantienen, van al alza o van a la baja», indicó el portavoz, quien pidió no avanzar posibilidades aún.
En este sentido, recuerda, que en julio no se podía saber que el mes de agosto y el inicio del septiembre traería lluvias, algo que ha hecho que la cosecha mejore en algunas zonas, aunque también han traído pedrisco en comarcas muy concretas. «Es posible que vayan al alza las previsiones, pero no lo sabemos, no tenemos datos todavía» y, por eso, de momento, siguen en las previsiones iniciales de vendimia y que apuntaban a unos 23 millones de hectolitros de vino y mosto. Esta cifra era un 33% más que los 17,57 millones cosechados en la campaña del año anterior, que fue la segunda más baja del siglo XXI.
De cara al encuentro, otro punto será el precio de la uva con una cosecha a la baja en otras zonas. «Los precios privados a nosotros nos da igual porque ellos llevan su política comercial y a nosotros eso no nos marca el camino ni el futuro ni eso tiene por qué ser el precio que vaya a tener el vino», recordó Fuente, señalando las grandes empresas y el pago que han avanzado. «En las cooperativas, la mayor parte de nuestra producción la exportamos, tenemos nuestros propios clientes y nosotros marcamos nuestra evolución de los precios». En este sentido, indicó que las pocas operaciones que se hacen con mosto o con algunos de los primeros vinos se mantienen los precios más o menos en los mismos niveles que el año pasado y con el resto no ha habido operaciones como para saber su evolución.
En esos primeros varietales se ha podido ver una cosecha algo mayor de la esperada, por lo que el encuentro de la próxima semana servirá para saber si es una tendencia.