La presunta víctima pide retirar la denuncia durante el juicio

Manuel Espadas
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El acusado de agredir y retener de manera ilegal a su expareja niega los hechos en una sesión en la que la denunciante testificaba por videoconferencia desde la cárcel

El acusado, durante su declaración ante la sala. - Foto: M. E.

La denunciante y presunta víctima de haber sido agredida y secuestrada por su expareja, ha pedido, durante el juicio que se ha celebrado esta mañana en la Audiencia Provincial, que se retirara la denuncia contra el acusado, de iniciales D. R. A. y de 25 años de edad. Lo hacía por videoconferencia, desde la cárcel madrileña de Extremera, donde se encuentra cumpliendo condena. Una petición que, como le recordaba el magistrado, no se podía atender por razones de procedimiento. Además, ayer mismo el abogado que la representaba enviaba un escrito a las partes advirtiendo que renunciaba a ejercer la acusación particular, quedando así como única acción acusatoria la ejercida por el fiscal, que solicita para el investigado una pena global de 7 años de prisión por los delitos de maltrato en el ámbito de violencia de género, quebrantamiento de medida cautelar y detención ilegal.

Durante su declaración por videoconferencia, la denunciante ha confirmado que, en agosto de 2021, el acusado, expareja suya y con una orden de alejamiento por una denuncia anterior, la abordó en una tienda de Ciudad Real y la engañó para subir a su coche, donde la trasladó a su domicilio familiar en Puertollano. Allí, según el relato de ella, la agredió, el rompió el móvil y la retuvo contra su voluntad durante cinco días, junto a los padres de él y un hermano, hasta que ella logró escapar y regresar a la capital, donde denunciaba los hechos ante la Policía Nacional. Un relato por momentos incoherente, justificado por ella por la "depresión" que padece. Incoherencias como que cuando ella formulaba la denuncia aseguró que fue su hermana quien la ayudó a volver de Ciudad Real a Puertollano, mientras que hoy afirmaba que la que la ayudó fue una hermana de una vecina. De hecho, su hermana declaraba en la vista oral, explicando ante el tribunal que ella no sabía nada de lo sucedido.

Hechos que negaba rotundamente el acusado, que ante la sala calificaba de "incierto" todo lo descrito por su expareja, quien no sería la primera vez que le pone una denuncia falsa "porque quiere hundirme la vida".

Su abogada, Agustina Madrid, solicitaba su libre absolución a la vista de la declaración "totalmente contradictoria" de la denunciante, enarbolando el derecho a la presunción de inocencia de su representado. El juicio quedaba visto para sentencia.