El Museo de la Merced cerrará sus puertas tras la caída de unos diez metros de cornisa en su fachada principal y que obligará a realizar una intervención de urgencia en el edificio del siglo XVII. Esta es la decisión de los técnicos de la Consejería de Cultura que visitaron el edificio, después de que a las 9.15 horas se produjera el derrumbe de la cornisa principal, la que se sitúa en la puerta de entrada. 

Fueron los propios trabajadores del museo  los que avisaron del derrumbe. «Han oído un estruendo y han comprobado que parte de la cornisa de la fachada principal, unos 10 metros, se ha desprendido a la vía pública, justo coincidiendo con la puerta de entrada al museo», explicó el jefe de servicio del área de Cultura de Ciudad Real, Enrique Jiménez. «Inmediatamente, nos hemos puesto en contacto con la Policía Local y con los bomberos para que procedieran a acordonar todo el perímetro del edificio y prevenir posibles desprendimientos y desgracias personales», dijo Jiménez, agradecido porque «no haya pasado nada, porque en ese momento había trabajadores en el interior» y además a las 10 horas había prevista una visita guiada.

Jiménez indicó que lo primero que han realizado los bomberos es retirar del alero las tejas y los elementos que podían caer a la vía pública y después se han puesto en contacto con el servicio de Museos regional para informar de la situación y «suspender toda la actividad en el museo, las visitas y presentaciones». Además, se empezó a tramitar ya «de urgencia una intervención para hacer una valoración» de lo ocurrido y retirar todo lo que pueda desprender y «a reponer de inmediato todo lo que haya que arreglar para que podamos abrir al público cuanto antes».

Invertirán de urgencia en la Merced para cambiar la cornisa - Foto: Rueda VillaverdeLa intención ahora es «valorar todo el perímetro exterior» y hacer también «una valoración del interior» para que la intervención en el edificio sirva para evitar futuros desprendimientos o daños interiores. En este sentido, lo más seguro es que se retire toda la cornisa para reponerla de nuevo y las molduras también. Por lo que hasta que no se haga una valoración no se sabrá cuándo podrá reabrir el museo. «Lo primero es garantizar que no haya peligro en la vía pública, sobre las personas y sobre el propio edificio», comentó Jiménez, quien apuntó que es preferible hacer con «detenimiento y profundidad» estos trabajos para que sean «duraderos».

POSIBLES CAUSAS.

Una de las posibles razones para que se haya producido este desprendimiento está en la lluvia caída durante la Semana Santa. «Es un edificio que tiene 400 años, sobre el que se han hecho muchas intervenciones, en su día como instituto y luego después en la adaptación como museo y muy probablemente las lluvias hayan sometido a carga el canalón y es posible que haya cedido», comentó el jefe de Cultura. 

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