Valdepeñas se abastece de los pantanos de Fresneda y La Cabezuela, que tienen capacidad para acoger 19 y 43 hectómetros cúbicos de agua, respectivamente. Pero la falta de precipitaciones lleva a que la situación «no esté bien». Así lo reconoce en declaraciones a La Tribuna el propio alcalde, Jesús Martín, quien señaló que de esos 62 hectómetros cúbicos la localidad consume «solo 2,7 al año». Pero no llueve y por lo tanto, no hay agua suficiente. De no llegar más precipitaciones en los próximos meses, en el mes de julio Valdepeñas tendrá que reforzar el abastecimiento con pozos. Se trata de una fecha clave, ya que a la demanda de la época estival se suma la vendimia y la evaporización. «No podemos jugar a agotar el agua», avisa Martín.
Aunque el alcalde calificó la situación de «alarmante», aseguró que el equipo de Gobierno lleva un año trabajando con la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) para garantizar el abastecimiento con varias acciones. Una de ellas, el aforamiento del pozo de Santa María, el más antiguo del término municipal y «con agua suficiente», pero que hay que filtrar y tratar antes de introducirla en la red debido al exceso de nitratos. De esta forma, Valdepeñas podrá «mandar agua desde el pozo de Santa María al depósito regulador de las aguas y, desde ahí, inyectarla a la red junto con la del pantano de Fresneda». Sería, explica Marín, una especie de baipás para «mantener las reservas de agua un año más».
No es la única actuación que se ha llevado a cabo. Este lunes, el Ayuntamiento ha aflorado un nuevo pozo, a unos cinco metros de distancia del Santa María, con el objetivo de «poder inyectar bombas y sacar agua». Para eso, el siguiente paso será la predepuración del pozo al depósito, por lo que el Ayuntamiento confía en que este pozo esté listo en unos dos meses, antes de julio. El objetivo, sentencia, es seguir teniendo agua. Y es que, el embalse de Fresneda, a fecha de ayer, se encontraba al 31,58 por ciento de su capacidad con seis hectómetros cúbicos, mientras la Cabezuela tampoco pasa por uno de sus mejores momentos: a fecha de este lunes solo almacenaba un hectómetro cúbico. Todo esto, lleva a Valdepeñas a «dotarnos de nuestros propios mecanismos», apunta Martín
El alcalde recuerda también que en los últimos veinte años se han invertido, con ayuda también de otras administraciones, más de 90 millones de euros. Al respecto, recuerda algunas actuaciones como el reforzamiento del sistema de abastecimiento de agua «duplicando las tuberías» ante el reventón que se producía algunos veranos y que dejaba a la localidad si agua. Para solventar el problema, se realizó una inversión de unos 14 millones de euros, y desde entonces, comenta con satisfacción, «no se han producido cortes en Valdepeñas», ya que de esta forma «si se rompe una, tiramos de otra», argumenta al tiempo que declara que «se han cambiado todas las tuberías de abastecimiento en todas las calles», por lo que no hay pérdidas. A este respecto, argumenta que la media de aprovechamiento de agua en España se sitúa en un 60 por ciento, lo que significa que de «cien litros que se cogen se aprovechan sesenta porque el resto, cuarenta, va a pérdidas». En el caso de Valdepeñas «aprovechamos el 85 por ciento de agua porque se han quitado todas las fugas», añade.
El regidor enfatiza que Valdepeñas es de las pocas localidades donde «no hay una tarifa plana del agua que se consume, y se paga por el consumo, habitante y día». En este sentido, Martín declara que la localidad hace dos décadas contaba con 26.000 habitantes y consumía 3,5 hectómetros cúbicos al año, ahora «tiene 5.000 ciudadanos más y consume un hectómetro menos», lo que significa, explica, que «los vecinos son conscientes de que el agua en Valdepeñas es un milagro».