La decisión del Parlamento Europeo de investigar la injerencia rusa en los partidos europeos, sobre todo de extrema derecha, y en los procos políticos de distintos países es una buena noticia. En el caso español ha animado a que se investigue las actividades rusas en el marco del 'procés´ independentistas y ha reclamado a las autoridades judiciales competentes a que investiguen los presuntos vínculos del independentismo catalán y el Gobierno de la Generalitat con el Kremlin. Al tiempo que lamenta los ataques contra los jueces que investigan cualquier actividad de injerencia rusa.
De la declaración del Parlamento Europeo se desprende que el caso de la injerencia de Rusia en Cataluña es uno más de los intentos rusos para desestabilizar las democracias europeas, que no ha tenido ningún éxito en nuestro país, más allá de las labores de desinformación que pudieron convencer a algunos de los partidarios del procés, que la independencia de Cataluña estaba al alcance de su mano, aunque acabó en la aplicación del artículo 155 de la Constitución y andando el tiempo en que el souflé soberanista se haya venido abajo.
Sin duda la resolución del Euro parlamento es un espaldarazo a la actividad del juez Joaquín Aguirre, que instruye el caso Voloh, sobre las relaciones y conversaciones de tres personas próximas al prófugo Carles Puigdemont con enviados rusos documentadas y vigiladas por el CNI, por lo que ahora no le debe quedar más remedio que acelerar la instrucción de un caso que ha tenido guardado en un cajón durante cuatro años sin que se produjeran avances en la investigación y para lo que ahora, coincidiendo con el debate parlamentario sobre la ley de amnistía ha solicitado una prórroga de seis meses para seguir pidiendo la realización de diligencias. Es de esperar que sea un tiempo suficiente para que eleve una motivación razonada, como ha hecho el juez de la Audiencia Nacional, Manuel García-Castellón, para que el Tribunal Supremo asuma la causa si considera que el aforado Carles Puigdemont puede ser investigado por un delito de alta traición. A lo que no dará tiempo es a que el comité encargado de evaluar si Puigdemont ha vulnerado el Código de Conducta de la Eurocámara emita su informe antes de que concluya la presente legislatura.
Tras la resolución del Parlamento Europeo se han producido dos declaraciones relevantes, la del propio Puigdemont, que afirmó que está convencido de que "si hubiéramos hecho presidente a Feijóo todo esto no pasaría" y que está relacionada con la pregunta retórica que realizó el ministro de Justicia, Félix Bolaños, el pasado miércoles al inquirir su reunión con Junts al que ahora considera implicado en delitos de terrorismo y de alta traición; y la de uno de los investigados por el juez Aguirre, El exdirigente de CDC, Víctor Terradellas que ya afirmó en el curso de la investigación judicial que la reunión que mantuvo con tres ciudadanos rusos -enviados por el Kremlin- "quedó en nada" y fue una "pura anécdota".
Ha sido una lástima que expresentador de la Cadena Fox, Tucson Carlson, que acompaño a Santiago Abascal en noviembre en una manifestación en Ferraz contra la ley de amnistía, que ha entrevistado a Vladimir Putin no haya sacado un minuto de tiempo para preguntar al presidente ruso sobre el envío de diez mil soldados rusos a Cataluña como fuerza de paz.