El conocido chef manchego Pepe Rodríguez comenzó pidiendo perdón a la gente de Ciudad Real: «Os he robado la receta del tiznao, de la caldereta, el queso, el vino… Creo que es momento de nombrarme embajador, como un humilde servidor de la cocina, de todo lo bueno de Ciudad Real».

Así comenzaba en Córdoba esta primera incursión nacional de la remodelada marca 'Sabor Quijote', un proyecto que da a conocer la riqueza gastronómica y el patrimonio cultural, histórico, turístico y natural de Ciudad Real. El Palacio de Congresos de Córdoba, la primera ciudad fuera de la provincia donde va la iniciativa, tenía sus mesas del patio llenas de productos de la provincia: vino, aceite, queso, pan de cruz, etc.

La vicepresidenta de la Diputación Provincial de Córdoba, Marta Siles, dio la bienvenida a una ciudad con cuatro patrimonios de la UNESCO, habló de la provincia de Ciudad Real como «los vecinos del norte con los que tantas cosas tenemos en común».

«El objetivo es vender Ciudad Real, porque tenemos todo»Por su parte, la vicepresidenta quinta de la Diputación de Ciudad Real y responsable de la gestión del Área de Impulso Sociocultural y Turístico de la provincia, María Jesús Pelayo, agradeció la hospitalidad de los cordobeses y centró su discurso en el lema de la provincia de Ciudad Real en Fitur: 'Tan cerca, tan diferente' que dijo «servía para definir la relación entre Ciudad Real y Córdoba». Asimismo, señaló que este acto sólo era lo que se ve desde fuera «en unas jornadas tremendas de trabajo, como los encuentros de 20 empresas de Ciudad Real con otras tantas cordobesas, para plantar semillas y firmar este convenio de colaboración con el Palacio de Congresos de Córdoba y que haremos extensivo a nuestros 102 municipios».

El presidente de la Diputación  de Ciudad Real habló de varios proyectos entre Córdoba y Ciudad Real, «como esa autovía que creemos que debe ser traída de vuelta al debate para que sea un corredor económico y de prosperidad». Valverde centró su discurso en el hermanamiento «necesario» entre las dos provincias, recordando que el Quijote pasa cierta parte en el Valle de Alcudia, al lado de Córdoba, siendo el personaje porque describe «todo lo que es La Mancha, tanto sus gentes como su gastronomía, sus paisajes o sus oportunidades».

El presidente hizo un recorrido por las bondades de la provincia, como sus «océanos de vides, sus tierras volcánicas o sus parques naturales y nacionales o ser el territorio cinegético más importante de Europa». Ciudad Real fue «frontera entre mundos», dijo Valverde, y ahí queda «en su cultura, en su teatro, en la zarzuela o en su Semana Santa».

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