La Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Ciudad Real vive este 2025 un año histórico: su Tercer Centenario. Fundada el 6 de enero de 1725 en el desaparecido convento de Santo Domingo, la cofradía con sede en la parroquia de San Pedro ha preparado un extenso programa de actos que, en palabras del consiliario Juan Carlos Fernández de Simón, «pretenden renovar el espíritu y el estilo de hermandad que queremos consolidar para el futuro».
El 6 de enero se abría oficialmente el año jubilar para la hermandad con una misa solemne, coincidiendo con la fecha de su fundación. «Hemos querido recuperar esa celebración para toda la parroquia, no solamente para la hermandad, y darle la solemnidad que merece», relata Fernández de Simón, que añade que es especial porque coincide con un «año festivo en la iglesia como es el Jubileo de la Esperanza». A partir de ahí, el calendario se ha llenado de cultos, actividades formativas y acciones caritativas, estructuradas en torno a tres pilares: culto, formación y caridad. La hermana mayor, Toñi Lucendo, explica que «desde el principio trabajamos junto a la parroquia para dar sentido catequético a cada acto». Entre las principales actividades destacan el Quinario Extraordinario en septiembre, una salida procesional extraordinaria y la Cátedra Jesús Nazareno, con conferencias de teólogos y expertos.
«Queríamos algo más que procesiones. Hemos apostado por la formación con ponencias de calidad», señala. El consiliario destaca especialmente el Viacrucis parroquial que se celebró el 28 de marzo, al que califica como «una experiencia de comunión eclesial que tuvo una gran respuesta de la feligresía». Además, se han planteado exposiciones, una mesa redonda con artistas vinculados a la hermandad y una peregrinación a Roma en este año jubilar. En el ámbito de la caridad, la hermandad mantiene su tradicional beca de estudio Carlos Acutis y el Fondo Solidario Santa Ángela de la Cruz. También han promovido un proyecto para ayudar dar a las Hermanas de la Cruz de Aldaia, «que atraviesan una situación difícil después de la DANA», cuenta Lucendo, que asegura que «la caridad es algo que va más allá del aniversario; es un compromiso que continúa».
A finales del siglo XIX y principios del siglo XX, existía en Ciudad Real un periódico homónimo: La Tribuna. En Semana Santa, realizaban especiales. Este recorte corresponde a la edición de 1914, en el que se puede ver la primitiva imagen del Nazaren - Foto: LTAmbos coinciden en que este centenario marca un antes y un después. «Este tipo de celebraciones sirven para renovar la hermandad, para implicar a los jóvenes y para sembrar una fe viva durante todo el año», afirma Fernández de Simón. Y Lucendo desea, con emoción, que «cuando termine el año, podamos decir que la hermandad ha crecido en profundidad, en unidad y en entrega, y que vivamos algo único porque en mi caso creo que ya no volveré a vivir otro».
Primer pilar: Formación
La Hermandad refuerza su compromiso solidario con acciones como la Beca Carlos Acutis, el Fondo Solidario Santa Ángela de la Cruz y proyectos en favor de las Hermanas de la Cruz de Aldaia. También se organiza una exposición fotográfica con fines benéficos. La caridad, más que un gesto puntual, se plantea como seña de identidad para el presente y el futuro.
Segundo pilar: Cultos
El programa de cultos del Tercer Centenario de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno incluye actos solemnes como la Misa de apertura, el Quinario Extraordinario, la Función Principal de Instituto y una esperada salida procesional extraordinaria. A ellos se suman oraciones, vigilias y un Viacrucis parroquial, que refuerzan el carácter litúrgico y espiritual del aniversario.
Tercer pilar: Caridad
La Cátedra Jesús Nazareno articula el apartado formativo del centenario con ponencias de expertos como Jaime Quiralte, Daniel Cuesta y Guillermo Heras. A través de charlas y mesas redondas, se reflexiona sobre la figura de Jesús, el papel de los cofrades y la historia de la hermandad. La formación se consolida así como eje permanente de vida cristiana.