El Viña Albali Valdepeñas disputa este martes en la pista del Peñíscola (20 horas) la eliminatoria de los octavos de final de la Copa del Rey. Un torneo al que el club vinatero concede una importancia extra después de no haberse podido clasificar para disputar la Copa de España.  El conjunto entrenado por David Ramos ha encadenado cuatro victorias en Liga y está ya a dos puntos del play off por el título, por lo que se encuentra pletórico de moral para afrontar este choque, que será el último antes de un parón de un mes por los compromisos de las selecciones nacionales.

En la anterior eliminatoria, y en plena crisis de resultados, los valdepeñeros eliminaron en la prórroga al Antequera, equipo que le derrotó en la final de este torneo en la temporada 2021-22.

Su penúltimo obstáculo antes de la fase final será el Peñíscola, equipo que entrena Santi Valladares y que es duodécimo en Primera División tras empatar en su pista este pasado sábado frente al Barça (3-3). En la anterior eliminatoria se deshicieron del Unión África Ceutí y ahora quieren pelear por volver a estar en la fase final de la Copa del Rey, lo que ya lograron la pasada temporada en Segunda División.

El pívot iraní Abbasi, que continúa en su país por cuestiones burocráticas, y Lolo, con molestias musculares tras la victoria del viernes en Pamplona, se quedarán fuera en la convocatoria de David Ramos. Por el contrario, Marcão regresará tras su reciente paternidad, mientras que Solano es duda.

"Tenemos muchas ganas de conseguir la clasificación", asegura el técnico de los vinateros, David Ramos, que califica al Peñíscola como un rival "incómodo e intenso, muy complicado de batir en su casa".

En el último precedente, ambos conjuntos firmaron tablas en Liga en el pabellón Virgen de la Cabeza (5-5).

El ganador de esta eliminatoria accederá a cuartos de final y se quedará a un solo partido de disputar la fase final del torneo.