El Caserío disfruta del ascenso de su equipo femenino a la División de Honor Plata, tercera categoría del balonmano femenino español.
Aunque todavía es pronto para pensar en el futuro, la idea que tiene el presidente del club, Julián Amores, es apostar por la continuidad. Así, salvo sorpresa, Sergio Hernández continuará como entrenador y se cuenta con buena parte del bloque que ha logrado el ascenso. No obstante, son cuestiones que deben ir definiéndose tras una primera reunión entre presidente y entrenador y que se celebrará esta misma semana.
«Se trata de un proyecto a largo-medio plazo y pensamos que lo mejor es ser continuistas. No queremos un proyecto resultadista, sino trabajar siendo profesionales y que la gente se sienta a gusto. Queremos cumplir nuestros compromisos y a partir de ahí ir creciendo», analizó Julián Amores.
Así, el objetivo en el primer año en Plata será «consolidarse y aprender» de la categoría. «Lo importante es ir creciendo y ser serios», reiteró Amores, muy satisfecho por este éxito del conjunto femenino.