Valdepeñas celebrará uno de los eventos más esperados del año en el mundo del flamenco: la XLV edición de su Festival de Arte Flamenco, que tendrá lugar en el Teatro Auditorio Francisco Nieva el 26 de octubre. El cartel, bajo el título Más que Jerez, reúne a un elenco de artistas de primera categoría que apuntan a dejar una noche inolvidable para los aficionados al género. La bailaora Mercedes Ruiz y el cantaor Ezequiel Benítez encabezarán una gala que contará, además, con la participación de figuras como David Lagos, Melchora Ortega y Santiago Lara, entre otros. Carmelo Rosales, presidente de la Asociación Cultural Flamenca Virgen de la Cabeza, organizadora del acto, se muestra  tajante con el nivel de los artistas seleccionados para esta edición: «Este año tendremos a artistas de primera categoría, internacionales, como Mercedes Ruiz y Santiago Lara. Ezequiel Benítez, que es el cantaor más demandado ahora mismo en el mundo del flamenco, también será parte del cartel. Es una alineación excepcional», afirma Rosales. 

Ezequiel Benítez, una de las grandes voces del flamenco actual, vuelve a Valdepeñas tras el éxito de su presentación en la edición anterior del festival. Su actuación del año pasado dejó una huella profunda en el público, lo que motivó a la organización a invitarlo nuevamente. «El Benítez ya lo tuvimos aquí el año pasado y fue un éxito rotundo. Desde el día siguiente la gente ya nos pedía que volviese. Así que este año está aquí otra vez», comenta Rosales. Benítez estará acompañado a la guitarra de Paco León y las palmas de Tate Núñez y Naim Real, formando un conjunto que lleno de su maestría y pasión.

Otra de las grandes protagonistas de la noche será la bailaora Mercedes Ruiz. Ella ha destacado internacionalmente por su arte y su técnica impecable. Su estilo profundo y su capacidad de transmitir emociones la han consagrado como una de las mejores en su campo. Ruiz estará acompañada por el cante de David Lagos y Melchora Ortega, dos voces que aportarán la fuerza y el compás necesarios para enaltecer su baile. La guitarra de Santiago Lara completará este cuadro flamenco, asegurando una velada llena de arte y emoción.

Arte, cultura, compás y sentimientoEl Festival de Arte Flamenco de Valdepeñas celebra este año su 45 edición, consolidándose como uno de los eventos culturales más importantes de la región. Desde su creación en 1981, la Asociación Cultural Flamenca Virgen de la Cabeza ha trabajado arduamente para mantener viva la tradición flamenca en la localidad, trayendo a los mejores artistas del panorama nacional e internacional. «La trayectoria de la asociación es increíble. 45 años trayendo a los mejores artistas desde 1981. Es mucho trabajo, mucho sacrificio, pero cuando la gala es un éxito, la gente lo agradece», afirma Rosales, que se muestra orgulloso de que el nombre de Valdepeñas resuene con fuerza en los círculos flamencos de Andalucía y del resto de España.

Sin embargo, la organización del festival no está exenta de desafíos. Rosales destaca que la financiación se ha vuelto cada vez más complicada, especialmente debido a la disminución de las subvenciones públicas. «Anteriormente obteníamos mayores subvenciones, tanto públicas como privadas, pero hoy en día, conseguir una subvención grande es prácticamente imposible», señala. Esta situación ha llevado a la asociación a centrarse exclusivamente en el festival y en actividades complementarias, como la masterclass que impartirá la bailaora Paula Rodríguez Lázaro en la mañana del 26 de octubre, o el recital programado para el 22 de noviembre.

Uno de los principales retos a los que se enfrenta el festival es la renovación del público asistente. Carmelo Rosales explica que los aficionados incondicionales, en su mayoría personas mayores, están desapareciendo, «porque es ley de vida», y la oferta de ocio actual «tan basta» dificulta que el flamenco capte la atención de los más jóvenes. Rosales comenta que «el desafío que tenemos es llenar el patio de butacas. Aunque claro, los artistas más mediáticos llenan, pero esos son muy pocos», comenta Rosales. A pesar de estas dificultades, el presidente de la asociación mantiene la esperanza de que el flamenco continúe atrayendo a nuevas generaciones. Considera que el desconocimiento y los prejuicios son las principales barreras para que los jóvenes se interesen por este arte: «Es un desafío que la gente joven se aficione al flamenco, creo que no se aficionan por todo lo que hay alrededor», dice Rosales. Más allá de los obstáculos financieros y de público, Rosales subraya que el objetivo principal del festival es emocionar al público. Afirma que «cuando no hay emoción, el arte casi está de más. Entonces, ¿qué es el flamenco? Pues es una definición muy complicada. Conozco a una persona que decía que el flamenco es arte, cultura, compás y sentimiento. Y yo creo que eso lo define bastante bien». reflexiona.

El festival, con su cartel de lujo y su apuesta por mantener viva la llama del flamenco en Valdepeñas, se presenta como una cita imperdible para los amantes de este arte. «Lo que queremos es que el festival crezca y siga trayendo a los mejores artistas, para que el flamenco siga vivo en nuestra ciudad», concluye.