La cesta de la compra dio un respiro a los ciudadrealeños durante el mes de junio en el que la inflación interanual de los alimentos, el principal quebradero de cabeza en los últimos meses para las economías domésticas de la provincia, marcó la subida más baja en los dos últimos años y medio. La alimentación cerró junio con una subida del IPC del 5,1 por ciento, la más baja desde enero de 2022 y con subidas que hace un año superaban el 11 por ciento. Bajan de precios, en comparación a junio de 2023, la leche, la carne de ave, la fruta en conserva, las legumbres y la patata y sigue subiendo, y mucho, el aceite. Casi un 40% en los últimos doce meses a la espera que tendrá la rebaja al cero por ciento del IVA en el aceite de oliva desde este mes de julio y hasta octubre aprobada por el Gobierno de España. Eso sí, su encarecimiento se frena en comparación con los incremento de precios que marcó en abril, por ejemplo, por encima del 50%. También es ahora más caro que hace un año la carne de ovino, más de un 10% o la fruta fresca, casi un 20% más, según recoge el Instituto Nacional de Estadística, el INE, que sitúa la inflación en la provincia en el 3,6 por ciento en el acumulado de un año, tres décimas por debajo de la que cerró mayo.

En ese abaratamiento del coste de la vida de los ciudadrealeños cuenta también el efecto de la campaña de rebajas en el vestido y el transporte, con los precios de los combustibles a la baja, a excepción del repunte que anotaron para la primera operación salida del verano. Periodo de vacaciones que también tiene que ver con la subida que se registra en los paquetes turísticos de la provincia. En un año son un 10 por ciento más caro, con alzas de precios que rondan el cinco por ciento en los restaurantes.

Capítulo aparte es el de la factura energética. La electricidad, el gas y otros combustibles se encarecieron en el último año el ocho por ciento. Es el tercer mes seguido con subidas en la tasa interanual. Desde finales de 2022 no encadenaba un trimestre seguido subiendo el precio de la energía en la provincia tras la 'normalización' del IVA de la luz del 10% al 21% tras permanecer casi tres años con la tasa impositiva reducida.