El Gobierno de Castilla-La Mancha ha presentado en Europa su innovador proyecto de inclusión sociolaboral 'Construir para volver a ser' dirigido a 2.000 mujeres en riesgo de vulnerabilidad. La consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, fue la encargada de presentar este proyecto piloto desarrollado por el Gobierno regional en la Semana Europea de las Regiones y Ciudades. Contó con un presupuesto de 8,9 millones.
Explicó que el proyecto se ha dirigido a 2.000 mujeres perceptoras del ingreso mínimo vital entre 18 y 55 años con menores a cargo en una situación de vulnerabilidad. Se ha trabajado en 81 municipios que abarcan todos los territorios de la región: en zonas urbanas, periurbanas, de intensa despoblación y extrema despoblación. Se contrató a 57 profesionales que realizaron una intervención integral desde todos los ámbitos: desde el acompañamiento personal, laboral, residencial, sanitario y relacional.
En cuanto a las conclusiones, expuso que «la mayoría de las mujeres que han participado han mejorado su situación de exclusión social en su ámbito personal, formativo y laboral». Avanzó que ha sido en las zonas despobladas donde el proyecto ha arrojado mejores resultados, «porque hemos podido llevar en igualdad de condiciones todas las herramientas necesarias para entrar en los circuitos de inclusión social».